Un total de 220 mil vehículos, equivalente a 30 por ciento de la flota vehicular, fueron rechazados al presentarse a la segunda verificación del año, debido a que no cumplieron con la nueva norma, informó Martín Gutiérrez Lacayo, coordinador ejecutivo de la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came).

Tras la instalación permanente de la mesa de trabajo en materia ambiental entre los gobiernos capitalino y del estado de México, explicó que al hacer más estrictos los estándares sobre los niveles de óxido de nitrógeno, únicamente circularán los vehículos que tengan mejores condiciones de control de emisiones.

De esta manera, los hologramas cero se acomodaron en 1 y 2, aunque a escala megalopolitano la cantidad de rechazados fue superior a 50 por ciento.

El desconocimiento de que los vehículos nuevos deben contar con un promedio de 600 kilómetros recorridos y los usados cumplir con un ciclo de manejo; así como la detección de algunas anomalías en verificentros, provocaron que los automovilistas no consigan el holograma cero, detalló.

El lector de OBD, que es un dispositivo de una computadora y que conocemos que tiene hoyitos y palitos, muchos de éstos los doblan al momento del uso y no embonan de manera correcta, lo que provoca que no se lleve a cabo la lectura, detalló.

Gutiérrez Lacayo comentó que esta situación ha sido aprovechada por algunas agencias para realizar, mediante un pago, preverificaciones. A ellas les corresponde activar los monitores para que el automóvil no tenga problemas para verificar, enfatizó.

Agregó que se detectó que muchos monitores que están activos, cuando llegan al verificentro se desconectan; estamos checando si es una falla de interconexión o se genera en la microbanca del verificentro, a fin de erradicar cualquier riesgo de corrupción.

Hoy, indicó, la comisión trabaja en una tabla maestra que permita, por conducto de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que los criterios de certificación de venta de vehículos cambien, adopten y homogeneicen el tipo de OBD, que se debe vender en México, pues existen 7 mil marcas y submarcas.