No habrá más Canelo Álvarez para este 2016. Un comunicado de la empresa que lo conduce, Golden Boy, confirmó que el nuevo campeón superwélter de la OMB sufrió una fractura en el pulgar derecho en el combate donde noqueó al británico Liam Smith, que si bien no necesita cirugía lo mantendrá alejado lo que resta del año.

Queda fuera entonces el combate de diciembre en Nueva York, pero sobre todo indica que si Saúl habrá de enfrentarse al kazajo Gennady Golovkin será hasta septiembre de 2017.

José Reynoso, entrenador del jalisciense, piensa que será hasta esa fecha en la que podría darse el combate. “Con Golovkin o sin él, Canelo va rumbo a la excelencia”, dijo sobre la insistencia con la que cuestionan al tapatío y la mencionada pelea.

A mí me confirmó Óscar de la Hoya y la gente de Golden Boy que le ofrecieron a Golovkin una cifra que es tres veces más de lo que ha ganado (trascendió que fue de 10 millones de dólares). En el equipo del kazajo han declarado que les han ofrecido poco dinero.

Ni siquiera han tenido la cortesía de responder. Así que nosotros debemos esperar a ver qué ocurre con las negociaciones, dijo el entrenador. “Parece que la opinión pública le cree más a lo que digan en el equipo de Golovkin que a nosotros. No sé si le tengan coraje al Canelo”.

Reynoso admitió que existe un intenso ataque a la carrera y figura de Álvarez, pero no es dominante. Sólo como anécdota recordó que en el estadio de los Vaqueros de Dallas impuso una marca de asistencia con 51 mil 240 personas, casi 10 mil más que Manny Pacquiao en el mismo recinto.

“Hay muchos que no creen en el Canelo, es verdad”, admitió Reynoso. Pero mucha gente no cree ni en Dios, por qué habría de inquietarnos de que no crean en Saúl.

Lo único que sí parece incomodarles es que no se reconozca al jalisciense como el mejor del momento, pues quien tiene el consenso es el nicaragüense Román Chocolatito González. Al finalizar el combate del sábado pasado, Saúl sostuvo que, aunque le pese a mucha gente, él es el mejor del momento.

¡Háganme el favor!, exclama Reynoso. “Dicen eso del Chocolatito porque ganó un cuarto campeonato en una división distinta. Puede ganar 10 títulos, pero eso no lo acerca a un peleador, digamos, como el Finito López. Ni siquiera le ganó a Carlos Cuadras”.

El escenario del Canelo será entonces las dos grandes fechas del boxeo en Estados Unidos: en mayo, con un rival por determinar, y con Golovkin, en septiembre.

El pelirrojo seguirá afinando su boxeo. “Mi intención es convertirlo en algo parecido a esos maestros del baile. A esos que son capaces de subir una silla a una mesa y desde ahí ejecutar, así será el boxeo del Canelo”, dijo Reynoso.