La designación de Tomás Zerón de Lucio como secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional (CSN) es una burla y con esta decisión el presidente Enrique Peña Nieto envía un mensaje claro de protección política, afirmaron los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos.

Anunciaron que no reanudarán el diálogo con la Procuraduría General de la República (PGR) si no se les informa el resultado de la investigación interna contra el ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) y éste sea sancionado por sus actuaciones ilegales en las indagatorias del caso Iguala, las cuales fueron reveladas por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI).

En conferencia, los padres de familia, abogados y representantes de organizaciones de derechos humanos consideraron que en los hechos se trata de un mensaje que apunta a la impunidad.

El nombramiento de este funcionario corrupto es un agravio a los padres de familia que llevamos dos años en busca de nuestros hijos desaparecidos, pero también es una burla para todos los mexicanos, dijo Felipe de la Cruz, uno de los voceros del movimiento de los padres de familia.

Mario Patrón, director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, instancia que representa legalmente a los padres de familia, señaló que lo que pudo ser un signo de distensión y oportunidad en la investigación sobre la desaparición de los estudiantes normalistas en Guerrero, con la renuncia de Tomás Zerón se convirtió en un signo de protección política por el nuevo cargo.

Vidulfo Rosales, abogado de los padres de los 43, destacó la sorpresiva renuncia, hace unos días, del visitador general de la PGR, César Chávez, quien llevaba la investigación interna contra Zerón. El 18 de agosto, dijo, se les informó que las investigaciones por la manipulación de posibles indicios, hallazgos y vestigios que no fueron reportados por el Ministerio Público indicaban que había elementos suficientes para determinar la existencia de responsabilidades.

Los padres anunciaron que el 26 de septiembre, a las 14 horas, marcharán del Ángel de la Independencia al Zócalo por los dos años de la desaparición.

En Chilpancingo, cerca de 4 mil personas marcharon el jueves, bloquearon la autopista del Sol México-Acapulco y realizaron un antigrito, en demanda de la presentación con vida de los 43.