Requieren de protección internacional como refugiados, advierte Mark Manly
Jueves 8 de septiembre de 2016, p. 13
El representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para Refugiados, Mark Manly, destacó en el Senado que a raíz del aumento en la violencia en Honduras, El Salvador y Guatemala, se ha incrementado la migración ‘‘de personas que no vienen buscando una vida mejor, sino huyendo por temor a morir; son personas que necesitan de protección internacional como refugiados’’.
Al participar en las audiencias denominadas La protección de los derechos de la infancia migrante: retos legislativos, Manly destacó que México es el país número dos de destino de estos migrantes centroamericanos, por lo que pidió ‘‘entender que por la violencia en esos tres países es cada vez mayor el número de familias enteras que emigra’’.
En su exposición resaltó que Guatemala y El Salvador tienen el índice más alto del mundo ‘‘de niños asesinados’’, y en El Salvador el año pasado la tasa de homicidios fue de más de 100 por cada 100 mil habitantes, que equivale a ‘‘cinco veces’’ la tasa de homicidios de México.
Refirió que de acuerdo con la Oficina de Drogas y Delito de la Organización de las Naciones Unidas, el triángulo norte de Centroamérica (Guatemala, Honduras y El Salvador) ‘‘es de las subregiones más violentas del planeta que no tienen conflicto armado declarado. Tan sólo en la pasada década 150 mil personas han sido víctimas de homicidio en esos tres países’’.
En ese contexto, subrayó: ‘‘Lo que hemos visto es un incremento importante en el número de personas que solicitan la condición de refugiado en otros países de la región. Estados Unidos sigue siendo el país de destino más importante y México ocupa el segundo sitio, pero Belice tuvo un incremento de 700 por ciento de refugiados el año pasado’’.
Debido a la situación de violencia en esos países, México cada vez es visto más como destino por las personas que buscan protección como refugiados. Apuntó que ha habido un aumento muy fuerte de solicitudes de refugio y para este año se prevé que 8 mil personas lo soliciten en México.
Por lo que toca a los menores de edad, dijo Manly, ‘‘el número de niños, niñas y adolescentes no acompañados no ha dejado de crecer’’.
Detalló que hay un cambio de perfil en los migrantes centroamericanos que llegan a México: ‘‘Son personas que buscan refugio, huyen de la violencia en sus países y a diferencia de hace cinco o seis años, pero ahora muchos menores vienen acompañados por sus padres; se trata de familias enteras’’.
Obligados a ser pandilleros
Ese cambio se debe a las condiciones de violencia que se viven en esa región de Centroamérica. ‘‘Estamos viendo que si un menor rechaza ser miembro de una pandilla, ella o él están en peligro’’. Y en el caso de las niñas, ‘‘si se niegan a ser novias de miembros de esas bandas, no sólo su vida está en riesgo, sino también la de sus familias. Eso explica por qué no solo vemos menores no acompañados, sino cada vez más familias’’.
A su vez, el titular del Instituto Nacional de Migración (INM), Ardelio Vargas Fosado, expuso que hay 450 mil desplazados internos en Honduras, que se convierten en eventuales migrantes a México.