En Michoacán, normalistas se suman a la protesta de unos 7 mil profesores
Reanudan las movilizaciones en Tabasco para exigir que se abrogue la reforma educativa
Sábado 27 de agosto de 2016, p. 4
Las marchas, bloqueos carreteros y toma de oficinas efectuados por maestros que exigen la abrogación de la reforma educativa, la reinstalación de una mesa de diálogo con el gobierno y justicia para los caídos en Nochixtlán, continuaron ayer en Michoacán, Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Tabasco.
Los de Michoacán efectuaron una marcha de pies cansados
en Morelia. Unos 7 mil profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) exigieron la liberación de los presos políticos y la reinstalación de los maestros cesados.
A la protesta se sumaron normalistas que exigen mil 200 plazas automáticas y la liberación de ocho detenidos el pasado 15 de agosto por robo calificado, daños en propiedad ajena y por atentar contra las vías de comunicación.
En Oaxaca, profesores de la sección 22 continuaron los bloqueos en siete puntos carreteros del Istmo de Tehuantepec. Hubo cierres totales en Juchitán, lo que ocasionó que decenas de automovilistas y transportistas quedaran varados.
Los contingentes de la Coordinadora Estatal de los Trabajadores de la Educación en Guerrero y de la normal de Ayotzinapa bloquearon dos carriles de la Autopista del Sol México-Acapulco para recordar 23 meses de la desaparición de 43 estudiantes. Policías federales los replegaron, por lo que los manifestantes regresaron a sus lugares de origen.
En Chiapas, los maestros de las secciones 7 y 40 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación que exigen la abrogación de la reforma educativa tomaron la sede de la secretaría del ramo, la Subsecretaría de Educación Federalizada y las oficinas de Planeación Educativa.
Cerca de un centenar de docentes de la CNTE retomaron las movilizaciones en Villahermosa, Tabasco, para exigir a las autoridades educativas continuar el diálogo y atender sus peticiones.
(Diana Manzo, Ernesto Martínez, Sergio Ocampo, Elio Henríquez y René Alberto López)