Tlapa de Comonfort, Gro.

El presidente del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, Abel Barrera Hernández, afirmó que existe una vinculación entre los gobiernos del estado de Guerrero y la delincuencia organizada; además, cuestionó que Acapulco, destrozado y empobrecido por la violencia, tenga más presupuesto que los 19 municipios de la Montaña de Guerrero.

Todo el presupuesto de Acapulco es mayor al que se destina a los 19 municipios de la Montaña, pero vean cómo está Acapulco. Por qué a los pobres se les sigue mandando a los sótanos del oprobio, y por qué en Punta Diamante siguen lucrando con los grandes negocios, subrayó durante su discurso por los 22 años de la creación de Tlachinollan.

El acto, efectuado este sábado en Tlapa de Comonfort, estuvo encabezado por los padres de familia de los 43 normalistas desaparecidos, a quienes dijo: No se entiende esta lucha sin ustedes. Su caminar no puede ir por otro lado más que a través de los pasos que ustedes dan para seguir buscando a sus hijos.

Este informe, expresó Barrera Hernández, es por las luchas, el dolor, la esperanza, y busca construir la verdad con ustedes y exigir justicia desde abajo, desde donde ustedes nos han dicho que hay que pelear sin venderse, sin arrodillarse frente al poder.

Se refirió a la violencia en el estado. “Aquí contamos un promedio de 6.8 muertes diarias en Guerrero por la violencia y la indolencia de la autoridad, que está unida a ese poder delincuencial que nos ha enmarañado a lo largo de tres décadas.

Qué ha pasado en Iguala hoy, al final del mes de junio hubo tres decapitados, en la cuna de la bandera. Chilpancingo se desgarra de dolor, las familias ya no saben si mañana podrán vivir tranquilamente con todos los miembros de su familia, acusó.

Al evento asistió, entre otros, Allan García, de la Oficina del Alto Comisionado de la Organización de Naciones Unidas en México, quien resaltó la existencia de Tlachinollan como evidencia de una realidad, y para edificar una sociedad mejor.

Manifestó que en Guerrero la violencia, la extracción rapaz de los recursos naturales, y la desaparición forzada, la violencia contra las mujeres, las detenciones arbitrarias, son cotidianos.

Esta es una ocasión propicia para reiterar desde las Naciones Unidas, nuestro reconocimiento a los pueblos originarios, destacó Allan García.