Río de Janeiro.

El clavadista mexicano Rommel Pacheco no pudo conseguir la segunda medalla olímpica para México al terminar séptimo en la final de trampolín de tres metros, con puntuación de 451.20.

La prueba fue ganada por el chino Yuan Cao (547.60), mientras la plata se la llevó el británico Jack Laugher (523.85) y el bronce fue para el ruso Evgenii Kusnetzov (498.90).

Tras haber generado grandes expectativas por su buen desempeño, –tanto en la preliminar como en las semifinales–, en las que se ubicó en segundo sitio, el yucateco tuvo un comienzo desastroso con sus dos primeros clavados y nunca pudo enderezar el camino para pelear por su primera medalla olímpica.

En su ejecución inicial Pacheco se alejó de los primeros puestos con un clavado de 3.4 grados de dificultad, en el que por poco se golpea con el trampolín. Obtuvo una calificación de 45.90, la más baja de la primera ronda.

Su segundo salto fue un poco mejor (58.50), pero se mantuvo último entre los 12 clavadistas y terminó por sepultar cualquier posibilidad de remontar.

Pacheco no dejó el fondo de la tabla de posiciones hasta después de la cuarta ronda. Su mejor ejecución fue la última, con calificación de 96.90. Gracias a eso se posicionó en el séptimo escaño.

Para el yucateco, número dos del mundo en la clasificación de la Federación Internacional de Natación (FINA), ésta fue quizá su última participación en Juegos Olímpicos, luego de Atenas 2004 y Pekín 2008. En Londres 2012 quedó relegado de la selección, algo que le significó un duro golpe en su trayectoria.

Rommel Pacheco había generado grandes expectativas al ubicarse en el segundo lugar durante las preliminares y la semifinalFoto Ap

Estoy un poco triste, me habría encantado ganar una medalla, pero las ansias de podio no me dejaron competir. Así es esto, fue un honor estar en Río 2016, tuvo un mal clavado y eso me costó después toda la competencia, declaró el deportista de 30 años de edad.

Aunque precisó que aún no piensa alejarse de las piscinas, no confirmó su participación en Tokio 2020: No me retiro, aún no sé cuánto tiempo más continuaré, pero estoy en buen nivel físicamente. Seguiré hasta que diga ya no puedo más, aunque no puedo decir todavía si estaré en la justa japonesa, indicó.

Horas antes, el mexicano Rodrigo Diego quedó eliminado en la semifinal del trampolín al finalizar en el puesto 16 entre 18 competidores. Sólo los 12 mejores avanzaron a la final.

Al representativo mexicano de clavados le quedan dos pruebas para evitar irse en blanco: plataforma individual de hombres y de mujeres, en la que competirá Paola Espinosa, la representante de esta disciplina más laureada en la historia del país.