Huayacocotla, Ver.

A menos de cuatro meses de que concluya su administración, el gobernador Javier Duarte aseguró que no existe rompimiento ni fricción con el PRI.

Tras ser señalado de presuntos actos de corrupción durante su gestión y de no haber logrado abatir la inseguridad en la entidad, Duarte descartó que exista distanciamiento con el presidente Enrique Peña Nieto y, prueba de ello, dijo, es la visita del mandatario al estado tras el paso de la tormenta Earl y la estancia ayer del titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), José Antonio Meade, en Zilacatipan.

Acerca de si le debe algo a Veracruz o al país, el priísta dijo: más que deberle, he entregado todo, he entregado mi tiempo, mi capacidad, mi concentración; he entregado todo por velar por un mejor Veracruz.

El periodo constitucional de Duarte concluye el próximo 30 de noviembre, y al día siguiente asume el nuevo mandatario, Miguel Ángel Yunes, quien ha hecho varias denuncias contra el gobernador saliente.

En entrevista, Duarte destacó que Veracruz no es de los estados más inseguros. Hoy afortunadamente el estado, según datos del Inegi, tan sólo en materia de seguridad estamos dentro de los más seguros del país. Estamos en el lugar número 18 de la República, donde el uno es el más violento y el 32 el menos violento. Estamos por debajo de la media nacional. Hemos combatido como nunca antes a la delincuencia organizada. Tal es el caso de los últimos acontecimientos que se acaban de dar, la captura de un peligroso capo que acabamos de hacer.

En cuanto a la relación con el PRI, aseguró que yo soy orgullosamente militante de un instituto político, y en ese sentido seguiré apoyando a mi partido, dentro de la legalidad y dentro de la responsabilidad que tengo. Respeto y apoyo las decisiones de mi partido, y evidentemente como miembro que soy, como consejero político nacional, siempre estaré atento a cualquier directriz.

Insistió en la cercanía con el instituto político en el que milita. Hay coincidencia plena en todo lo que mi partido haga. Claro, siempre respetando la ley, como funcionario y representante popular que soy, como titular del Poder Ejecutivo del estado, tengo que respetar la ley y, sobre todo, ordenamientos de índole política. En ese sentido hasta donde me permite contará mi partido siempre con mi apoyo.

Sobre si existe alguna deuda con el estado que ha gobernado por casi seis años, indicó: me ha tocado gobernar en momentos complejos, difíciles, muy complicados, en un cambio de era (...) Veracruz es un estado de por sí complicado, una entidad de 8 millones de habitantes, de más de 74 mil kilómetros cuadrados de territorio. En ese sentido, he dado lo mejor de mí para que Veracruz pueda pasar de estos momentos tan complicados debido a los efectos de la tormenta Earl.

Aseguró que su labor en Veracruz le da la satisfacción de un deber cumplido.