Su compatriota Fraser-Pryce, quien buscaba su tercer título olímpico, ganó el bronce
El británico Farah revalidó el cetro en 10 mil
Harting, de Alemania, oro en lanzamiento de disco
Domingo 14 de agosto de 2016, p. 3
Río de Janeiro.
El poder de la velocidad jamaiquina quedó plasmado en el podio de Brasil con la victoria en 100 metros de Elaine Thompson y el tercer lugar de Shelly-Ann Fraser-Pryce, quien buscaba su tercer título olímpico en la prueba reina del atletismo.
Thompson, la nueva monarca de la velocidad, arrebató el título a su compatriota al imponerse con tiempo de 10.71 segundos, secundada por la estadunidense Tori Bowie (10.83), mientras la ahora destronada Fraser-Pryce –quien ganó la prueba en Pekín 2008 y Londres 2012– cruzó la meta tercera (10.86).
“‘Team Jamaica all day everyday’”, exclamó Usain Bolt al festejar en Twitter el triunfo de sus coterráneas como preámbulo de lo que este domingo –cree– sucederá en la final varonil del hectómetro.
En otra prueba trepidante, el británico Mohamed Farah revalidó el título en 10 mil metros, a pesar de haber caído al inicio de la carrera.
El campeón mundial en cinco y 10 mil metros en Pekín 2015 tropezó y cayó en la primera vuelta a la pista cuando los corredores apenas se acomodaban en la lucha por la punta tras la salida –incluso casi le pisan la cabeza. Sin embargo, se levantó y volvió a la cabeza del pelotón.
El británico logró imponerse de manera sensacional con registro de 27.05.17 minutos y conservó el trono de la distancia, el cual ganó hace cuatro años en Londres.
La plata y bronce correspondieron al keniano Paul Kipngetich Tanui (27.05.64) y al etiope Tamirat Tola (27.06.26), de manera respectiva.
El público apoyó a la etiope Etenesh Diro, en una remontada en su serie de 3 mil metros obstáculos tras haber perdido la zapatilla derecha en una caída.
En un primer momento eliminada, al llegar séptima, la corredora de 24 años fue calificada para la final por decisión del jurado de apelación, así como otras dos participantes implicadas en el incidente.
Una tropezó a un kilómetro de la llegada, hizo caer a Diro, quien intentó calzarse la zapatilla, pero dándose cuenta de que perdería mucho tiempo la lanzó al suelo y reanudó la carrera con el pie desnudo.
Un eco de admiración en el estadio olímpico acompañó la remontada de la etiope, quien adelantó a cinco rivales para terminar séptima, a 20 segundos de su récord personal y entre lágrimas.
La primera medalla de oro fue para el alemán Cristoph Harting en lanzamiento de disco. El polaco Piotr Malachowski, antes favorito, firmó una distancia de 67.55 metros, mientras el germano alzó los brazos con 68.37. Su compatriota Daniel Jasinski fue tercero (67.95).
Harting sucede como campeón olímpico a su hermano Robert, ganador en Londres 2012, eliminado en la calificación.
En la final de salto largo varonil se coronó el estadunidense Jeff Henderson con marca de 8.38 metros, seguido del sudafricano Luvo Manyonga (8.37) y el británico Greg Rutherford (8.29).
En salto triple femenil, la colombiana Caterine Ibargüen y la venezolana Yulimar Silva prometen librar un duelo apasionante en la final de este domingo.
La actual campeona del mundo, Ibargüen de 32 años, apenas necesitó un salto de 14.52 metros para clasificar directa, mientras la emergente Rojas realizó tres intentos y pasó con la séptima mejor marca (14.21). Paravskevi Papahristou, de Grecia, y la kazaja Olga Rypakova también son firmes candidatas a medalla.
La varilla de salto con garrocha quedó fijada en 5.70 metros, altura librada por nueve atletas, encabezados por el estadunidense Sam Kendricks, el griego Konstadinos Filippidis y el brasileño Thiago da Silva, en ese orden según el número de intentos.
La jornada dominical del atletismo abrirá con el maratón femenino y supondrá un previsible nuevo pulso de las dos superpotencias del atletismo africano, Etiopía y Kenia, tradicionales viveros de fondistas y estrellas de la resistencia.