Este proceder es absolutamente irregular y antidiplomático
: embajador venezolano
México, Argentina, Brasil y Colombia, entre los 15 miembros solicitantes, encabezados por EU
Preocupante, el fracaso de la gestión mediadora de ex presidentes, señala diplomático mexicano
Viernes 12 de agosto de 2016, p. 25
Washington.
Encabezados por Estados Unidos, un grupo de 15 países de la Organización de Estados Americanos (OEA), entre ellos México, Argentina, Brasil y Colombia, apremiaron este jueves al gobierno de Venezuela a permitir sin demora la realización de un referendo revocatorio del mandato del presidente Nicolás Maduro impulsado por la oposición de ese país, antes de que termine este año.
La declaración, difundida por el Departamento de Estado tras una sesión del Consejo Permanente de la OEA, fue suscrita también por Belice, Canadá, Chile, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay.
Llamamos a las autoridades venezolanas a garantizar el ejercicio de los derechos constitucionales de los venezolanos y que los pasos pendientes para la realización del referendo revocatorio presidencial se adelanten de manera clara, concreta y sin demora, lo que contribuiría a la resolución efectiva y rápida de las dificultades sociales, económicas y políticas en el país
, se señaló el texto.
El grupo de países también reiteró su llamado a un diálogo entre el gobierno de Maduro y la oposición, luego de iniciativas frustradas en los últimos meses. Urgimos al gobierno de Venezuela y la oposición a mantener lo más pronto posible a un diálogo franco y efectivo, de manera directa o con el apoyo de facilitadores
, señalaron en la nota.
El embajador mexicano Luis Alfonso de Alba expresó su preocupación ante lo que consideró la falta de resultados que tuvo la gestión de los ex presidentes dominicano, panameño y español, Leonel Fernández, Martín Torrijos y José Luis Rodríguez Zapatero, respectivamente, para mediar entre el gobierno y la oposición venezolanas, y subrayó que ni siquiera se estableció un canal directo de comunicación.
En junio pasado la OEA aprobó una declaración en la que sus miembros ofrecían ayuda a favor de un gran diálogo nacional en Venezuela y respaldaban la iniciativa de los ex presidentes. En ese entonces, el secretario general del organismo continental, Luis Almagro, invocó la Carta Democrática Interamericana al considerar que Venezuela vive alteraciones graves al orden democrático.
En reacción a la declaración de este jueves, el embajador venezolano Bernardo Álvarez calificó el comunicado de asombroso
. Y agregó: no me voy a referir al contenido, no es el momento ni el sitio, pero el procedimiento es absolutamente irregular y antidiplomático
.
Al cierre de esta edición, Maduro no había hecho pronunciamiento alguno sobre la declaración del grupo de 15 países de la OEA.
Los 15 gobiernos se pronunciaron dos días después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela anunció el cronograma para activar la consulta, que fija hasta finales de octubre la recolección de 4 millones de firmas (20 por ciento del electorado), lo que abriría un proceso de casi un mes para validarlas y luego comenzaría un plazo de 90 días dentro del cual podría celebrarse la consulta, lo que aleja la posibilidad de que se lleve a cabo este año.
La oposición busca celebrar el referendo antes del 10 de enero de 2017, que es la fecha límite para convocar a nuevas elecciones en caso de que el mandato de Maduro sea revocado, de acuerdo con la Constitución.
Si el referendo se realiza en 2016 y Maduro pierde se debe convocar a elecciones, pero si es revocado después de esa fecha límite, los dos años restantes de mandato los completará su vicepresidente, nombrado por Maduro, quien puede cambiarlo cuando considere conveniente.
En Caracas, la mayoría opositora en la Asamblea Nacional aprobó una resolución para exigir al CNE que publique el cronograma a fin de dar celeridad al proceso de activación del referendo para este año y garantizar lo que describieron el ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos.
También lo exhortó a iniciar el procedimiento para convocar las elecciones regionales (de gobernadores) que están previstas para finales de este año, y que podrían suspenderse debido al trámite del referendo.
De igual manera, llamó a la Defensoría del Pueblo para que garantice el efectivo respeto a los derechos políticos e intente acciones legales contra los directivos del CNE que obstaculicen sin justificación el proceso electoral.
La bancada mayoritaria en la Asamblea aprobó el pronunciamiento después de un debate en el que alegó que el referendo revocatorio es la fórmula democrática para superar la crisis de desabasto de alimentos y medicinas en el país.
Según el oficialismo, el CNE ha precisado que de un millón 957 mil 779 firmas reunidas por la coalición opositora en su petición de referendo revocatorio de Maduro, unas 605 mil 727 no cumplieron con los criterios establecidos por la norma para iniciar el proceso.
En este contexto, Venezuela y Colombia acordaron una apertura gradual y controlada de la frontera común a partir del próximo sábado, anunció el presidente colombiano Juan Manuel Santos, luego de un encuentro que se extendió por casi tres horas con Maduro.
La apertura de la frontera tendrá un horario de las 6 a las 21 horas locales en cinco puntos fronterizos, explicó Santos desde la ciudad venezolana de Puerto Ordaz, estado de Bolívar.
Maduro ordenó en agosto de 2015 el cierre de algunos pasos fronterizos a raíz de un ataque que sufrieron tres militares y un civil en la localidad de San Antonio del Táchira cuando realizaban operaciones de combate al contrabando.
La medida que inicialmente comenzó en el estado suroccidental del Táchira luego se extendió a los estados de Zulia, Apure y Amazonas, y las autoridades venezolanas deportaron a más de mil colombianos sin residencia legal.
Las acciones de Venezuela desataron una crisis diplomática que fue superada poco después de conversaciones que sostuvieron Santos y Maduro en septiembre en Quito.
El gobierno de Maduro enfrenta una grave crisis política y económica, cuyo malestar se ha visto reflejado en protestas por una escasez de alimentos y medicinas que alcanza 80 por ciento. A esto se suma una inflación galopante de 180.9 por ciento durante 2015, y según proyecciones del Fondo Monetario Internacional llegará a 720 por ciento este año.