Bruselas.

En Bélgica, en la ciudad de Chareloi, se reportó un ataque contra dos mujeres policías, quienes fueron heridas con un machete al grito de Alá akbar (Alá es grande). El agresor fue abatido a tiros por un tercer agente y murió en el hospital.

La agresión se suma a otras realizadas con arma blanca en países como Alemania y Gran Bretaña.

Ambas agentes están fuera de peligro, indicó la policía de Valonia, ubicada a unos 60 kilómetros al sur de Bruselas.

Según una agencia de prensa belga, una tiene heridas profundas en el rostro y está hospitalizada, y la segunda presenta cortes leves.

El ataque se produjo por la tarde frente a la comisaría, la cual permanecerá inaccesible durante la investigación.

Este parece ser otro ataque con connotación terrorista, declaró el primer ministro belga, Charles Michel, a la emisora RTL, y llamó a la prudencia en esta fase inicial de las indagatorias.

No cambia el nivel de alerta

El ministro del Interior, Jan Jambon, quien calificó la agresión de vil, dijo que la unidad de análisis de amenazas Ocam decidió no modificar el nivel de alerta de seguridad.

La agresión se produce en momentos en que el nivel de alerta terrorista en Bélgica, cuya capital fue blanco de ataques reivindicados por el grupo yihadista Estado Islámico contra el aeropuerto y una estación del Metro el pasado 22 de marzo, en los que murieron 32 personas, permanece en nivel 3, el cual indica un grave y probable riesgo de atentado.

Desde los ataques en París del 13 de noviembre de 2015, preparados en Bélgica y en los que participaron yihadistas belgas, la policía ha realizado decenas de allanamientos antiterroristas.

Según el ministro del Interior, 457 hombres y mujeres belgas se han ido o intentado ir a combatir a Siria o Irak. De ese número, 266 permanecen en esos países y 90 están desaparecidas y probablemente muertas, según la Ocam.

En tanto, en Londres, un noruego de origen somalí de 19 años, acusado de apuñalar a varias personas en la Russell Square, continuará detenido tras comparecer este sábado ante un tribunal en la capital británica.

Zakaria Bulhan, residente en Londres, está acusado de matar a la estadunidense Darlen Horton, profesora retirada, quien visitaba esta capital, en la que su marido, un profesor de la Universidad Estatal de Florida, impartía un curso.