La dirigencia nacional priísta, así como legisladores de ese partido, rechazaron la intención del sector empresarial de beneficiarse de la exención de impuestos por la ‘‘inacción’’ gubernamental frente al magisterio disidente.

A su vez, el senador Alejandro Encinas (PRD) cuestionó el ‘‘alarde’’ de la Confederación Nacional de Cámaras Industriales (Concamin) de que sus afiliados dejarán de invertir 50 mil millones de pesos si persisten los plantones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).

Mientras legisladores de PAN, PRD y PRI, así como el presidente de ese partido, consideraron básico el diálogo, el gobernador de Puebla, el panista Rafael Moreno Valle, respaldó al empresariado y recomendó utilizar ‘‘mano dura en una mano, y una zanahoria en la otra’’, estrategia que, dijo, le dio resultados con el magisterio en la entidad. Recordó que despidió a 41 maestros que no entregaron la prueba enlace y dialogó con los dirigentes del sindicato, a quienes les entregó diversos estímulos.

Encinas evaluó que el monto mencionado por la Concamin (50 mil millones de pesos) no se corresponde con la capacidad económica del sector industrial. ‘‘Sería muy bueno conocer las declaraciones de impuestos que han hecho en años anteriores’’.

También con matices, senadores y diputados de PRI, PAN y PRD consideraron que se deben escuchar los planteamientos de los empresarios en relación con los daños económicos provocados por los plantones y movilizaciones de los maestros, pero rechazaron la posibilidad de que los patrones dejen de pagar impuestos.

El coordinador de los diputados el PRI, César Camacho, se manifestó en contra de que los empresarios dejen de cumplir con sus obligaciones tributarias. ‘‘Sería permitir un trato discriminatorio en perjuicio de la inmensa mayoría de los contribuyentes. Todos tenemos obligación de pagar impuestos’’, dijo.

La obligación de cumplir con el fisco está ‘‘en la Constitución, ni siquiera en las leyes secundarias, de modo que el punto de vista de ese sector productivo es jurídicamente inviable’’, definió.

En nombre de la bancada del PRD en el Senado, su coordinador, Miguel Barbosa, opinó que ‘‘deben atender los planteamientos de las organizaciones empresariales, sin caer en la tentación de usar la fuerza pública en contra de las formas de expresión de la CNTE’’. Por su parte, Marko Cortés, coordinador de los diputados panistas, consideró que el gobierno federal debe, ‘‘de forma determinante, resolver ya el conflicto magisterial’’.

Su compañero de partido y presidente de la mesa directiva del Senado, Roberto Gil, pidió a la administración federal ‘‘no ceder a chantajes’’ de la CNTE. Lo que se requiere ‘‘es una estrategia de desactivación del conflicto sin poner en riesgo la reforma educativa. No debe haber un paso atrás en su implementación y vigencia, porque ello significaría sacrificar a otra generación’’.

En breve entrevista, después de reunirse con la dirigencia del sector popular, el presidente del tricolor, Enrique Ochoa Reza, llamó al sector empresarial a respetar las instituciones y apeló a la realización de un diálogo respetuoso y abierto ‘‘para encontrar, a través del derecho, la solución a los problemas’’.

(Con información de Sergio Ocampo y Javier Santos, corresponsales)