Lo que debería iniciarse como un periodo de descanso, para algunos usuarios del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) las vacaciones son sinónimo de estrés debido al retraso en operaciones aéreas, pérdida o robo de equipaje, sobreventa o cancelación de vuelos y enormes filas en el área de migración. Pero no sólo eso, personas consultadas señalaron que también tienen que lidiar con las agencias de viajes cuando los hoteles no respetan reservaciones.

El problema comienza cuando las pasajeros llegan en carro a recoger o despedir a sus familiares y amigos porque tardan varios minutos en avanzar, ya que algunos automotores se estacionan en doble fila. Patrullas de la Policía Federal y de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México realizan patrullajes para agilizar el tránsito.

En un recorrido por las terminales 1 y 2 del aeropuerto capitalino cientos de turistas deambulan por los pasillos cargando maletas, otros corren para no perder el avión, y muchos más esperan sentados en el suelo.

En estas días de asueto también hay largas filas en las oficinas de migración, así como en las bandas de revisión de equipaje, y en ocasiones los viajeros tardan más de media hora formados en cada punto.

En el área de comida rápida de la terminal 2 personal del aeropuerto colocó plásticos azules en locales que lucen sucios y abandonados para que los pasajeros no se den cuenta que están descuidados.

En lo que va de julio de este año el AICM transportó más de 3 millones 361 mil 700 pasajeros. A partir del inicio de las vacaciones de verano, la terminal aérea más importante del país luce abarrotada. En los últimos cinco días ha desplazado entre 126 mil y 144 mil pasajeros diarios.

Aimé Reyes, una paseante, comentó que cuando sale de viaje es más cautelosa con su equipaje, pues en las pasadas vacaciones de Semana Santa le robaron dos botellas tequila. Puse una queja en la aerolínea pero nunca me respondieron.

Entre los reclamos más frecuentes de turistas nacionales y extranjeros se encuentran las demoras en los despegues y aterrizajes, que tardan más de una hora y hasta dos en las aerolíneas Volaris y Viva Aerobús, de bajo costo.

Ayer los destinos a Chetumal, Monterrey, Campeche, Cancún, Guadalajara, Ciudad de Carmen, San Francisco, Miami, Houston, Lima, por mencionar algunos, tuvieron contratiempos para despegar o cancelaron. Asimismo, se retrasaron las llegadas de Zihuatanejo, Tepic, Cozumel, Guadalajara, Veracruz, Bogota y Oakland.

La Procuraduría Federal del Consumidor instaló módulos frente a los mostradores de aerolíneas para que las personas denuncien a la empresas aéreas que no cumplan con el contrato establecido. Hace unas semanas la dependencia incluso colocó sellos de suspensión a un restaurante que se encuentra en la zona comercial del AICM porque en la cuenta incluye la propina y además cobra extra por cubierto.