San Cristóbal de Las Casas, Chis.

En el naufragio de una lancha ocurrido el miércoles pasado en las costas de Chiapas murieron por lo menos cuatro niños migrantes centroamericanos que eran transportados hacia a Estados Unidos, informaron familiares de uno de ellos.

Señalaron que el padre de Érick Robles, de seis años, cuyo cadáver fue encontrado el jueves, regresó a El Salvador sin el cuerpo del menor porque los “polleros lo amenazaron con armas de fuego y le dijeron que debía desaparecer”.

El papá de Érick nos contó que la lancha se volcó a las 6 horas del miércoles y como la marea estaba muy fuerte y estaba oscuro no pudieron salvar a los cuatro niños; apenas se salvaron ellos, agregaron.

Indicaron que de acuerdo con el testimonio del padre del menor en la embarcación viajaban aproximadamente 11 personas. Los adultos siguieron su camino después del naufragio, excepto los familiares de los infantes.

Nos dijo que había tres cuerpos en la playa y que otro no aparecía, refirieron. Añadieron que el infante, cuyo cuerpo fue identificado este viernes por uno de sus tíos, era hijo único y sus padres estaban separados. Agregaron que desconocían si los demás menores ahogados son salvadoreños u hondureños. Los familiares pidieron a las autoridades mexicanas facilitar la repatriación del cadáver de Érick.

La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó en un comunicado que un agente del Ministerio Público de la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos en Contra de Inmigrantes inició una carpeta de investigación para esclarecer las condiciones en que murieron los menores.

Fuentes oficiales informaron que brigadas de la PGJE, en coordinación con las secretarías de Marina, de Seguridad y Protección Ciudadana, de Seguridad Pública Municipal y el Instituto Nacional de Migración continuaron este viernes con la búsqueda del otro cuerpo en costas de Chiapas.