Con el cierre del Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México (AICM) 33 mil 400 personas con ingresos muy superiores al promedio en la capital dejarán de laborar directamente en sus instalaciones, al no existir una razón que justifique trasladarlos automáticamente –salvo algunos muy especializados– a la nueva terminal de Texcoco.

La diputada de Morena en la Asamblea Legislativa María Eugenia Lozano Torres refirió además que el gobernador del estado de México, Eruviel Ávila, declaró que la construcción del nuevo aeropuerto generará más de 600 mil empleos y gestionará que éstos sean para mexiquenses.

Al presentar el estudio El nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México y sus efectos económicos sobre el turismo, expuso además que la capital del país tendrá una pérdida neta de 8 millones 9 mil 333 turistas-noche, que representan una derrama económica de mil 269 millones de dólares y 178 mil 333 empleos directos e indirectos.

El estudio, elaborado por el ex secretario de Turismo capitalino Carlos Mackinlay Grohmann, con información estadística del mismo gobierno de la ciudad, se entregará a funcionarios y legisladores federales y locales, además de divulgarlo entre la población, para advertir que el cierre del AICM significará sacar de la capital uno de los centros económicos y estratégicos del país.