Niza.

Bélgica se clasificó a octavos de final de la Eurocopa como segunda del grupo E, tras ganar 1-0 a una Suecia que quedó eliminada del torneo y dijo adiós a su máxima estrella, Zlatan Ibrahimovic. Los belgas se medirán el domingo con Hungría.

El partido fue emotivo y se resolvió a seis minutos del final con un espectacular disparo del volante Radja Nainggolan desde fuera del área. Los suecos tuvieron suficientes oportunidades para obtener la victoria, pero no fue su noche.

El resultado sólo reflejó la igualdad entre ambas selecciones, pero no lo presenciado en Niza, ya que el duelo fue emocionante y lleno de oportunidades para los dos conjuntos, que ofrecieron un gran espectáculo.

El comienzo del encuentro ya fue eléctrico. Suecia necesitaba ganar para seguir con vida y Bélgica lo tenía que evitar para asegurar el segundo puesto del grupo, ya con Italia como puntero seguro.

La escuadra belga puso el juego colectivo y los suecos el carácter. Unos con su técnica y otros con su físico buscaron el área rival y casi pareció milagroso que llegara el descanso sin anotaciones.

Con Yannick Carrasco en la banda izquierda, Eden Hazard presente en la media punta y Lukaku peleándose con toda la defensa rival, a Bélgica sólo le falto precisión en el pase final o el remate. Aun así, Lukaku probó varias veces a Andreas Isaksson.

Esta vez Zlatan Ibrahimovic sí tuvo presencia en el área enemiga con un par de disparos que pasaron cerca del arco de Thibaut Courtois.

En la segunda parte, con el correr de los minutos, Suecia se fue con más jugadores al ataque, ya que necesitaba la victoria para seguir en la competencia. Con la entrada de John Guidetti añadió más dinamita a la zona de vanguardia.

En cambio, Bélgica pareció jugar con el marcador, más preocupado en no perder solidez defensiva que en retomar el control del duelo. Además, por lo regular se siente más cómoda jugando al contragolpe.

Lukaku tuvo el gol al minuto 73, precisamente en una transición rápida que contó con un espectacular pase de Kevin de Bruyne, el cual terminó en una decisiva intervención de Isaksson.

Fue el comienzo de instantes de tensión y Zlatan cobró un tiro libre que Courtois rechazó al 76.

Los minutos finales estuvieron cargados de dramatismo. Suecia se la jugó en el ataque y cada recuperación de Bélgica se convirtió en una invitación al contragolpe definitivo.

Kevin de Bruyne sacó un balón bajo los palos al 82, luego de un cabezazo de Andreas Granqvist, en una acción que resultó decisiva porque dos minutos después llegó la sentencia de Bélgica con un trallazo de Nainggolan que dejó sin oportunidad al arquero sueco Andreas Isaksson.

Fue el gran final de un duelo digno de una Eurocopa que llenó de alivio a Bélgica y mandó a Suecia a casa, antes de lo que le hubiera gustado a su gran estrella, Ibrahimovic, quien ya había anunciado que el torneo continental sería su última participación con la selección, luego de 116 partidos.