El consejero José Roberto Ruiz Saldaña anunció que por dignidad renunciará a formar parte de la Comisión de Quejas, en protesta porque sus colegas decidieron mantenerse tres meses más como presidentes de ocho comisiones del Instituto Nacional Electoral (INE) al margen de la ley.

Su inconformidad, compartida por sus colegas Pamela San Martín y Benito Nacif, desató una agria discusión en el Consejo General del instituto, donde representantes partidistas aprovecharon para echar en cara a los consejeros que por un lado pasen por alto la ley y por otro les exijan a ellos apego a la misma.

Con este debate se revivió otro similar escenificado en 2015, cuando también Ruiz Saldaña acusó al consejero presidente, Lorenzo Córdova, de haber pactado con el grupo del consejero Marco Antonio Baños el reparto de las presidencias de las comisiones, de las que él fue excluido.

Ayer, el mismo consejero desató los demonios en el INE al plantear que este acuerdo se basa en la ilegalidad y es como si el legislador quisiera ampliar su periodo de tres años sin considerar la relección.

Con la voz quebrada, advirtió: De aprobarse el acuerdo, si se prorrogan las presidencias, en las próximas horas estaría presentando mi renuncia a la Comisión de Quejas. Por dignidad no podría avalar con mi presencia dicha integración y la permanencia de esa presidencia.

En 2011 otro consejero, Francisco Guerrero, renunció a la presidencia del Comité de Radio y Televisión en protesta por la aprobación del reglamento sobre el tema, ya que él avalaba la posición de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y Televisión.

En esta ocasión, el consejero Ciro Murayama pidió desdramatizar un poco el tema y aseguró que a Ruiz Saldaña se le ofreció presidir la de Quejas o la de Capacitación, pero si alguien no ha presidido comisión fue porque renunció a la propuesta que hicimos.

Los consejeros Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, durante la sesión extraordinaria del INEFoto Jesús Villaseca

Sin mencionar nombres, Baños aseguró que ha habido procesos de autoexclusión y añadió: Una cosa es trabajar para los medios, darle nota, y otra ponerse a trabajar en las comisiones.

Ruiz Saldaña ha sido una voz disonante en Quejas. Se ha opuesto a la censura de promocionales y criticó este año un par de criterios del Tribunal Electoral, avalados por sus colegas Adriana Favela y Beatriz Galindo, que impidieron que cuatro o cinco mensajes se difundieran en radio y televisión.

La consejera San Martín demandó a sus colegas que no ataquen a un consejero con argumentos dichos en privado, si ellos mismos se inconforman de que esa información se ventila en los medios.

Aunque primero reclamó la ilegalidad de dicho acuerdo y dijo que él sí iba a dramatizar, el panista Francisco Gárate consideró incorrecta la decisión de Ruiz Saldaña. No es bueno confrontar a un órgano del que es parte.

Otra voz discordante fue la de Nacif, quien se pronunció en contra de este aplazamiento y propuso otra salida sin éxito.

Varios representantes partidistas respaldaron a los consejeros inconformes con esta medida, como Horacio Duarte, representante de Morena, quien anunció que impugnarán esta decisión ante el Tribunal Electoral, porque es ilegal y tiene que ver con una peligrosa disputa interna entre los consejeros.

Al concluir la sesión, Ruiz Saldaña aclaró que sí le propusieron presidir la Comisión de Quejas, pero sólo si votaba en favor del proyecto. No podía hacerlo.

Atizó el debate y respondió a quienes afirman que incumple sus deberes, llamando a que se revise qué consejero faltó más, llegó tarde o viajó más.