n polémico proyecto presentado ante la legislatura de Buenos Aires propone que el Metro de la capital argentina cuente con vagones exclusivos para mujeres, con el fin de evitar el acoso sexual.

La iniciativa presentada por la legisladora Graciela Ocaña está inspirada en experiencias similares de México, Brasil y Japón. Las usuarias tendrían la posibilidad de viajar en sus propios vagones que funcionarían de lunes a viernes en horarios de siete a 10 y de 17 a 19 horas, que es cuando hay mayor afluencia de pasajeros.

Como ciudadanos, permanentemente somos testigos de episodios de acoso o abuso, en los que con frecuencia la mujer es la agredida, al momento que viajan en el transporte público en la ciudad de Buenos Aires, explicó la legisladora del partido Confianza Pública.

Mujeres entrevistadas en las estaciones del Metro de Buenos Aires expresaron que no están de acuerdo con el proyecto sobre el llamado subte rosa, porque discrimina a los pasajeros masculinos al considerarlos a todos potencialmente peligrosos. Afirmaron que es preferible educar a los varones en lugar de apartar a las mujeres, así como incrementar la seguridad.

En las redes sociales también surgió la polémica: “En vez de concientizar y penar como se debe, quieren poner un vagón rosa para las mujeres en el subte? Claro, porque el acoso se da sólo ahí.”, ironizó una mujer en un tuit.

El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, mencionó que el sistema que propone Ocaña no tiene ninguna lógica porque podrían darse situaciones de violencia de género en cualquier otro transporte. No funcionaría y no es una solución; más bien, es rendirse ante estas situaciones, resaltó.

Ap