El balance es positivo, asegura Juan Carlos Osorio
Jueves 2 de junio de 2016, p. a36
San Diego.
En uno de los peores juegos de la selección mexicana con el técnico colombiano Juan Carlos Osorio, el delantero Javier Hernández, entró de cambio y definió el 1-0 en el amistoso contra Chile, duelo en que los sudamericanos se vieron mejor y tuvieron oportunidades para que el resultado fuera distinto.
En la cancha del estadio Qualcomm, el Tricolor se quedó con la victoria de manera sufrida gracias a un remate de Chicharito, al minuto 87, en duelo de preparación para la Copa América Centenario 2016, y durante el que había sido superior la escuadra andina.
A escasos días de que comience ese torneo, primero oficial para Osorio, éste todavía probó gente en el Tri para encontrar su mejor 11 inicial, en víspera del debut del domingo contra Uruguay.
En un contragolpe, el cuadro andino estuvo cerca de abrir el marcador al inicio del encuentro, en una combinación de Alexis Sánchez con Edson Puch, quien mandó su disparo desviado de la meta defendida por Alfredo Talavera.
El equipo mexicano prácticamente pasó inadvertido en la primera mitad. El arquero de La Roja, Cristopher Toselli no se notó, pero tampoco aprovechó su mejor momento el cuadro entrenado por el técnico Juan Antonio Pizzi.
Experimentar en la alineación mexicana provocó que Chile se viera mejor en el terreno de juego, tal vez en el peor primer tiempo del Tri en la era Osorio y con leve mejoría en la parte complementaria.
La agresividad futbolística de Chile hizo que se luciera en la cancha, mientras los mexicanos tuvieron muchos problemas para salir con la pelota.
Avanzaba el tiempo y la escuadra tricolor empezó a acusar estragos en el control, perdiendo el temple en sólo media hora.
El conjunto de Osorio parecía un equipo alternativo y la superioridad de los chilenos ya era inocultable; atacaban por el centro del campo y por los costados, mientras los mexicanos no podían contenerlos ni recuperar la pelota.
Poco antes del descanso, La Roja bajó la intensidad, como para reservar dinamita para la segunda parte. Fue una verdadera suerte para los mexicanos no irse con un par de anotaciones al medio tiempo. Osorio hizo los primeros cambios y decidió sacar de la cancha a Néstor Araujo y Paul Aguilar. Entraron Jesús Molina y Andrés Guardado.
Los cambios, en apariencia, funcionaron, pues México empezó a tener mayor contacto con el balón y una salida más creativa, algo que le hizo falta en toda la primera parte.
Ni cinco minutos habían transcurrido, cuando Guardado hizo un alarde de clase y recortó a dos jugadores chilenos. Se los quitó con excesiva elegancia y envió al área, donde Oribe Peralta recibió el pase; sin embargo, la presión de la defensa sudamericana lo obligó a disparar sin mucha colocación. La mejor jugada tricolor, la única hasta entonces.
Chicharito, quien cumplía años, llevaba apenas 10 minutos en la cancha cuando un centro impecable de Miguel Layún sirvió para que el tapatío rematara de cabeza en una solución increíble que abrió el marcador con gran olfato goleador.
El técnico Osorio terminó satisfecho con la victoria: El balance es positivo. En el primer tiempo ellos controlaron el juego y por momentos dominaron. En el segundo fue distinto
, dijo Osorio.
Fue un partido muy parejo con grandes jugadores de élite. Dejamos a algunos hombres para el inicio del torneo, pero estoy satisfecho y nos ilusiona
, agregó.
Juan Antonio Pizzi celebró también el trabajo de sus jugadores, aunque lamentó: Merecíamos un mejor resultado del que refleja el marcador. Se gana o se pierde por pequeñas situaciones y por más que quiera uno controlar, hay virtudes de jugadores que están fuera de nuestro control y eso se refleja en el marcador
, finalizó.