Domingo 29 de mayo de 2016, p. 29
Karen, de 18 años, está en sexto semestre en el Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (Cecyt) 11, del Instituto Politécnico Nacional (IPN), la última voca en paro total de labores. Es una de los 101 mil jóvenes que este fin de semana presentan el examen para entrar al nivel superior de la casa de estudios.
El director general del Instituto, Enrique Fernández Fassnacht, ha dicho que los estudiantes que como ella no han tomado clases este mes por los paros están en riesgo de no ingresar al nivel superior del Politécnico u otras universidades aunque pasen los exámenes de admisión, porque no conseguirán a tiempo los documentos que les permitirán inscribirse. A mí y a otros de sexto semestre no nos preo-cupa eso. Las autoridades tendrán que resolverlo, porque vamos a la misma institución y aunque digan que no, alguna prórroga nos tendrán que dar si no regresa la escuela a clases
, dice la joven.
Pero a otros estudiantes sí les preocupa la posibilidad de quedarse un año fuera. “En febrero –cuenta Paty, también alumna de la Vocacional 11– hice mi examen para estudiar Arquitectura en la UNAM, y me quedé. Y si no volvemos no me podré inscribir”.
Ana, otra alumna de la voca 11, del Casco de Santo Tomás, hará el examen de admisión para el Politécnico y cree que, por ahora, la única alternativa para seguir sus estudios es iniciar clases extramuros, una propuesta de las autoridades politécnicas.
Una comisión del Consejo General Consultivo (CGC) fue esta semana a dialogar con la comunidad de la vocacional. Ahí los consejeros –directores de escuelas y alumnos– dijeron que antes de que finalice la semana se dará a conocer qué planteles o espacios serían habilitados para dar las clases extramuros.
Los alumnos de sexto fueron citados por las autoridades el viernes pasado en el Instituto Leonardo Bravo, de la colonia Tabacalera, una institución privada que recibe del IPN el reconocimiento de validez oficial a los cursos que imparte. Así consta en el portal web oficial del Cecyt 11.
Karen dice que no cree que las autoridades vayan a permitir que se pierda el semestre. Afectaría a quienes egresamos y a los que van a ingresar a la escuela
. Y si se perdiera, provocaría mucha molestia y sería un pretexto o un motivo para que las movilizaciones continuaran en nuestra escuela o en otras de las que ya están en clases.