Ginebra. Apenas 10 días después de que el reformado consejo de la FIFA se reunió por primera vez, uno de sus integrantes afronta una posible suspensión por acusaciones de corrupción en el otorgamiento de una sede del Mundial. La fiscalía de ética del organismo pidió inhabilitar dos años a Wolfgang Niersbach, tras una investigación sobre la candidatura para la Copa del Mundo de Alemania 2006, lo que podría acabar con la carrera de Franz Beckenbauer, involucrado en el caso, quien con otros tres miembros de la FIFA es investigado por varios contratos y pagos irregulares de siete dígitos durante el proceso de candidaturas.