Washington.

Funcionarios de inmigración planean una serie de redadas para mayo y junio con el objetivo de deportar a cientos de madres y niños centroamericanos que ingresaron a Estados Unidos sin papeles, según fuentes y un documento interno visto por Reuters.

La operación sería la más extensa contra familias de inmigrantes llevada a cabo por el gobierno de Barack Obama este año tras una de dos días de enero que se centró en los estados de Georgia, Texas y Carolina del Norte y resultó en la detención de 121 personas, en su mayoría mujeres y niños.

El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés) ahora dijo a sus oficinas en todo el país que lancen una ola de 30 días de arrestos, centrados en madres y niños a quienes ya se les advirtió que dejaran Estados Unidos, dice el documento.

La operación también se realizará contra menores que ingresaron al país sin un tutor y que desde entonces cumplieron los 18 años, dice el documento. Dos fuentes confirmaron los detalles del plan. No se conocen las fechas exactas de las redadas y los detalles podrían cambiar.

Una portavoz del ICE dijo que la agencia no confirma ni niega la existencia de acciones específicas en curso o futuras de cumplimiento de la ley. Agregó que los inmigrantes que ingresaron sin papeles después del primero de enero de 2014 son prioridad en la lista de deportaciones.

Los recursos federales se vieron superados en 2014 por una ola de inmigrantes que cruzó la frontera con México, en particular mujeres y niños que escapaban de la violencia en Honduras, El Salvador y Guatemala. Las nuevas redadas son una respuesta a un aumento de los ingresos ilegales de mujeres centroamericanas que viajan con sus hijos.

Desde octubre de 2015 a marzo de 2016 la Patrulla Fronteriza detuvo a más de 32 mil unidades familiares, definidas como madres y niños viajando juntos, por cruzar ilegalmente a Estados Unidos. En ese mismo lapso en 2014-2015, la cifra fue de 14 mil arrestos y en 2013-2014 de unos 19 mil 800.

Otro documento visto por Reuters dice que al secretario de Seguridad Interna, Jeh Johnson, le preocupaba el reciente aumento de los cruces. Activistas de inmigración dicen que le pidieron al funcionario que abandonara planes de futuras redadas.

Las redadas no son la respuesta, dijo Marielena Hincapie, directora ejecutiva del National Immigration Law Center, un grupo de ayuda legal y activismo para inmigrantes. Es un desafío humanitario, agregó.