iclo negro en Sudamérica: Venezuela, para colmo golpeada terriblemente por la sequía –que obliga a una fuerte y muy impopular restricción de la producción y el consumo–, está ante la disyuntiva del triunfo electoral masivo de la derecha en un posible referendo revocatorio del mandato del presidente Nicolás Maduro o un gobierno nacionalista minoritario, muy frágil e impopular de las fuerzas armadas, aún chavistas, que estaría preñado de futuras crisis internas y divisiones. La prensa derechista, como El Nacional o Tal Cual (compuesta por la mayoría de los medios), está en una posición cómoda, aparentemente legalista, aunque estimule un golpe, porque le juega a la oposición entre las iniciativas de la Asamblea Nacional (que la derecha controla) y las medidas defensivas del Ejecutivo en crisis y de la Corte Suprema de Justicia. En Argentina comienzan, pero en orden disperso, las grandes movilizaciones contra la agresiva política proempresarial y los escándalos del gobierno de Macri, que la gran prensa derechista (Clarín, La Nación) finge ignorar, mientras llena sus páginas con noticias sobre la corrupción del gobierno kirchnerista. Los gobiernos progresistas, que no tocaron las bases de la economía capitalista, se hunden o retroceden impotentes o en la confusión. Los ejemplos más claros son Argentina, donde buena parte del kirchnerismo pasó al servicio de Macri, o Brasil, donde está triunfando un golpe parlamentario, a la paraguaya, sin que la Unasur y el Mercosur den señal de vida. Incluso, sin que los diarios –hasta los cubanos Granma y Juventud Rebelde– informen sobre lo que sucede en ese país.

* * *

El golpe brasileño: O Estado de Sao Paulo informa que por tercer mes consecutivo cayó la producción de petróleo y gas de Petrobras, y sostiene que en el Senado los partidarios del Sí al impeachment son 50 y quienes defienden a Dilma Rousseff sólo 20. De modo que la destitución pasará si no hay un milagro, como podría ser la anulación por la justicia del proceso porque lo inició un delincuente condenado como tal o la extensión del proceso de impeachment al vicepresidente golpista Michel Temer, quien hizo lo mismo que la presidenta.

* * *

Varias: La Nación, de Buenos Aires, informa que el gobierno de Macri importará gas chileno, aunque cuesta el doble que el boliviano. El diario boliviano Cambio escribe que hay dudas razonables sobre la existencia del hijo de Zapata (la ex mujer del presidente).