Bogotá.

Colombia avaló ayer definitivamente el matrimonio entre personas del mismo sexo, tras una histórica decisión de la Corte Constitucional que lo convierte en el cuarto país sudamericano en autorizarlo formalmente.

Los jueces de la sala plena por mayoría sostuvieron que no viola el orden constitucional vigente el casar a las parejas de personas del mismo sexo, aplicando analógicamente la institución del matrimonio prevista en la ley civil en la actualidad para las parejas de personas de sexo distinto, explicó la presidenta de la Corte, María Victoria Calle.

En la sesión plenaria, seis de los nueve magistrados del alto tribunal, el máximo en Colombia en relación con la Carta Magna, decidieron que toda persona es libre y autónoma para constituir una familia (...) acorde con su orientacion sexual, recibiendo igual trato y protección bajo la Constitución y la ley, agregó Calle.

Hace dos semanas, la Corte Constitucional había dado un paso decisivo hacia la aprobación del matrimonio igualitario al revocar una ponencia contraria a igualar los derechos de matrimonio de las parejas heterosexuales y homosexuales. La propuesta votada este jueves, que recogía todos los elementos del sentido de la mayoría alcanzada el 7 de abril, se convertirá en un máximo de 30 días en un fallo definitivo que sentará jurisprudencia.

En Colombia existía un vacío legal sobre el tema tras vencer el 20 de junio 2013 el plazo que la misma Corte había dado al Congreso para legislar en la materia. Desde entonces, como el tema solamente estaba interpretado por el tribunal en una sentencia de 2011, las parejas del mismo sexo podían acudir a formalizar su vínculo con efecto de matrimonio civil. Pero pocos funcionarios se arriesgaban a registrar uniones en esos términos, lo cual motivó el reclamo de la comunidad gay.

Este jueves, al pronunciarse sobre las seis tutelas que había sido llamada a examinar, la Corte decidió que ante el acto de matrimonio, los jueces, notarios, y registradores del estado civil deben asegurar el ejercicio de los derechos fundamentales de ciudadanos, acordándoles a todos ellos igual trato.

El magistrado Alberto Rojas, autor de la ponencia votada este jueves, explicó a periodistas que a partir de ahora, el vínculo de unas 70 parejas registrado como unión solemne desde 2011 pasa a ser automáticamente matrimonio.

Es una excelente decisión, resaltó Germán Rincón, abogado de una de las parejas que interpuso tutela ante la Corte.

Da respuesta jurídica a casos que estaban en el limbo, agregó el activista por los derechos de los homosexuales, al celebrar que desde hoy ningún juez o notario podrá negarse a casar a parejas del mismo sexo.

Marcela Sánchez, directora de la ONG Colombia Diversa, aplaudió la concreción de una noticia esperada desde la votación del alto tribunal hace dos semanas. Hoy con toda certeza podemos decir que sí, que la corte en Colombia aprobó el matrimonio igualitario, enfatizó.

Sin embargo, este jueves la comunidad gay no salió a festejar frente a la sede de la Corte, como lo hizo con euforia el 7 de abril, las parejas homosexuales no ocultaron su felicidad.

Estamos muy contentas porque Colombia dio un paso hacia la diversidad, resaltó Adriana González, una de las involucradas en los casos estudiados por la Corte Constitucional.

Han sido años muy difíciles de incertidumbres y frustraciones, pero por fin vamos a hacer nuestra anhelada luna de miel, agregó, sobre sus planes con su pareja, Sandra Marcela Rojas.

En Colombia, los derechos de los homosexuales sólo han sido reconocidos por la Corte Constitucional, ante la falta de legislación del Congreso.

El año pasado, el alto tribunal otorgó a las parejas del mismo sexo el derecho a adoptar menores, fueran o no biológicos de uno de los miembros.

En 2007 había admitido la unión de hecho entre parejas del mismo sexo (sin considerarlo matrimonio) y concedió derechos de afiliación al sistema de salud a los cónyuges; al año siguiente garantizó el derecho a pensión para las parejas gays y en 2009 consagró sus derechos patrimoniales.

En Latinoamérica, Argentina fue, en julio de 2010, el primer país en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, seguido de Uruguay. Brasil ha autorizado de facto el matrimonio gay desde mayo de 2013. En México, el matrimonio homosexual es legal en la capital y en algunos estados.