Torreón, Coah.

Agentes de la Procuraduría General de Justicia del Estado internaron en el Cereso de Torreón a 18 aficionados de Tigres que el pasado sábado por la noche protagonizaron una riña en los pasillos y en el exterior del estadio Territorio Santos Modelo (TSM), casa del cuadro de la Comarca Lagunera.

De los detenidos, 15 son originarios de Monterrey, dos de Torreón y uno de Saltillo, y todos enfrentan cargos por lesiones, daños y violencia en los estadios; este último lo incluye la Ley de Cultura Física y Deporte.

En tanto, luego de esa gresca, en la capital del país el Partido Revolucionario Institucional (PRI) propuso en la Cámara de Diputados endurecer las sanciones económicas a quienes participen en riñas en los inmuebles deportivos.

Hasta ahora, el delito de violencia en los estadios no es considerado grave y quienes lo cometen salen libres bajo fianza, además de que las multas oscilan entre 730 y 6 mil 573 pesos.

Luego del partido correspondiente a la fecha 15 del torneo Clausura 2016, que ganaron los locales 2-1, grupos de fanáticos se enfrentaron a golpes en las gradas y causaron daños al inmueble, pues desprendieron butacas y depósitos de basura para lanzarlos entre sí.

Afuera del inmueble la riña fue a pedradas y de acuerdo con la procuraduría hay 12 personas con lesiones y 19 vehículos con reporte de vidrios rotos y actos de vandalismo.

Manchó un juego de futbol, lo lamentamos. No lo minimizamos. Vamos a castigar a estas personas hasta donde la ley lo permite. Tampoco podemos hacer una cosa que la misma no permite. Esperamos que la comunidad pueda disfrutar del futbol como siempre lo ha hecho: en familia, dijo el gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdez.

Los policías municipales detuvieron a 22 aficionados del conjunto de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), pero el Ministerio Público sólo acreditó con videos y testimonios de 12 lesionados la participación de 18, informó el delegado de la PGJE en Torreón, Gerardo Marqués Guevara.

Adriana Balderas, quien recibió una golpiza, contó que algunos seguidores del equipo regio estaban fuera de control. Se terminó el partido y mi hermano y yo íbamos comiendo unos burritos. Llegaron y lo tumbaron a él de una pedrada en la nariz. Lo agarré de la mano y de la camiseta, lo jalaba para adentro del estadio pero al verlo tirado en el piso corrieron a darle de patadas. Yo lo seguía jalando y como no lo soltaba también me golpearon a mí.

Por otra parte, al presentar la propuesta en el recinto de San Lázaro, el legislador prísta Daniel Torres Cantú señaló que la intención es que las multas sean de un mínimo de 2 mil 191 a 10 mil 956 pesos, debido a que las actuales no inhiben las grescas en los estadios, que los aficionados lancen objetos contra los jugadores o bien entren ilegalmente al terreno de juego.

Con el aumento de las multas se refuerza la prevención de delitos y faltas administrativas en estadios y salvaguardar la integridad de los asistentes, particularmente mujeres y niños, dijo durante una sesión que comenzó sólo con 265 diputados presentes, en la cual la mesa directiva saturó la agenda de dictámenes.