Coatzacoalcos, Ver.

Empleados de las compañías contratadas por la empresa de ingeniería y construcción industrial ICA Fluor y familiares de personas desaparecidas tras el estallido en la planta Clorados 3 de la firma Petroquímica Mexicana de Vinilo (PMV) –operada por Mexichem en asociación con Petróleos Mexicanos (Pemex)– arremetieron contra las camionetas de los dirigentes del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), encabezados por Carlos Romero Deschamps, y las de la avanzada de la Presidencia de la República, cuando se disponían a ingresar a las instalaciones.

Enardecidos por la falta de información sobre el número de trabajadores que perecieron en la explosión del complejo petroquímico Pajaritos, y de los que se encuentran desaparecidos, se abalanzaron sobre los vehículos de lujo que trasladaban a la comitiva de los líderes de Pemex, encabezados por el senador Carlos Romero Deschamps y los dirigentes de la secciones 10 y 11 del gremio petrolero, Jorge Wade y Ramón Hernández Toledo, respectivamente.

Los lugareños ansiaban saber quiénes eran los funcionarios o políticos que entraban a la planta, pues querían dialogar con alguna autoridad que les explicara dónde están sus familiares. Como los ocupantes no bajaron los vidrios de ninguna de las unidades, los inconformes comenzaron a golpearlas con botellas de agua y a lanzarles piedras.

El chofer de la camioneta en que viajaban los dirigentes petroleros pudo maniobrar y entrar a las instalaciones por una de las puertas de emergencia, mientras el vehículo con sus escoltas y ayudantes era agredido.

En octubre de 2013, ICA Fluor firmó un contrato con Petroquímica Mexicana de Vinilo, sociedad formada por Mexichem y Pemex com un valor de 205 millones de dólares para modernizar la planta de policloruro de vinilo, ubicada en el complejo petroquímico Pajaritos.