El Gobierno de la Ciudad de México apuesta por la electromovilidad como una de las estrategias para combatir la contaminación ambiental, por lo que llevará a cabo un proceso para sustituir las unidades del Trolebús por autobuses eléctricos, así como incrementar la flota de taxis de este tipo, informó el titular de la Secretaría de Movilidad, Héctor Serrano Cortés.

Por ese motivo, dijo, se solicitaron al gobierno federal recursos para arrancar el proyecto, con los que se prevé sustituir trolebuses y poner en circulación taxis eléctricos.

Entrevistado luego de inaugurar el octavo Congreso Internacional de Transporte, señaló que antes de fin de año habrá avances importantes en este rubro. Agregó que en el caso de los taxis se trabaja en la definición de esquemas, como que, a diferencia de los que funcionan con gasolina, a los autos eléctricos que se utilicen para proporcionar ese servicio se les dé un periodo de vida útil de más de 10 años, así como incrementar el incentivo por la destrucción de unidades viejas, que es de 35 mil pesos.

Insistió en que mejorar la calidad del aire es un asunto de salud y que los vehículos eléctricos son los que menos contaminación generan, además de tener otras ventajas como, en el caso de los taxis, que requieren de mantenimiento menor, además de que se obtienen mayores ingresos. En el caso del Trolebús, si bien éste es cero emisiones, su operación es compleja por el sistema de cables que utiliza.

En tanto, el presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad, Jesús Padilla Zenteno, afirmó que la capital del país tiene un problema de hacinamiento vehicular serio y acusó a las autoridades de no tomar decisiones para solucionar este problema y sólo hacer discursos fáciles.

Advirtió que si los gobiernos, especialmente el federal, no actúan para mejorar el transporte público como estrategia para disminuir el número de automóviles que circula en la capital, en 20 años la congestión vehicular será tal que la velocidad promedio, que en la actualidad es de 12 kilómetros por hora, se reduzca a cuatro kilómetros en horas pico, y tendrá un costo de 70 mil millones de pesos al año.