En los Juegos Olímpicos hay dos tipos de atletas: los que van por el podio y el resto sólo a participar. México va a esto último. No hay expectativas de medallas porque el atletismo no tiene esperanzas, afirmó Luis Pineda, estadístico de la federación de la disciplina.

Con datos duros, destacó el retroceso a nivel nacional en comparación con las potencias mundiales, lo que refleja la triste realidad por el sistema deportivo que tenemos con el borrón y cuenta nueva en cada sexenio.

El especialista estima que son lejanas las posibilidades de ganar preseas en Río 2016, porque el mejor atleta colocado entre los 10 primeros es el marchista Horacio Nava (50 kilómetros).

México no ha logrado un avance significativo en 16 años, cuando se ganaron las últimas medallas olímpicas con Joel Sánchez (bronce) y con el finado Noé Hernández (plata), en 20.

“No tenemos atletas para ganar metales y si los hay será circunstancial de no ir rusos, chinos ni kenianos. Los mexicanos sólo irán a competir, a superar sus marcas o a buscar la mejor actuación en las diferentes pruebas.

Quisiera que todos ganaran, pero los números son duros. Si hay tres finalistas y quedan entre los ocho mejores sería excelente. La realidad dice que estamos mal y así seguiremos si no cambia el sistema, dijo el ex director técnico de la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo.

Expuso que tan sólo en maratón las marcas que se pidieron para Río 2016 son más altas que las de Seúl 1988, cuando los varones cumplían con 2:12.30 horas y actualmente con el 2:15 no tenemos ninguno que se haya acercado a ese tiempo.

El atletismo cuenta hasta ahora con 14 clasificados y la última que podría sumarse sería Madaí Pérez, quien mañana corre el maratón de Hamburgo.