Espectáculos
Ver día anteriorMiércoles 6 de abril de 2016Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

El juego de Yalta ofrece emocional concierto actoral a dos voces

Indaga obra en la infructuosa lucha por tratar de dominar las pasiones
 
Periódico La Jornada
Miércoles 6 de abril de 2016, p. a11

“En El juego de Yalta se aborda una idea, una paradoja, que siempre me ha interesado: la del cazador cazado, la del hombre cuarentón, o mayor de esta edad, que gusta tener historias con mujeres de todas las características, pero que de pronto tiene una relación extramarital con la que cambia todo: con una joven, de la cual se ha enamorado profundamente”, expresó en entrevista Ignacio Escárcega, director de esta puesta en escena que se presenta en el teatro Helénico.

A todos los donjuanes les llega su 40 y 20, parodió Escárcega a propósito de la balada interpretada por José José. Así, El juego de Yalta se ubica en el horizonte dramático de las Candilejas de Chaplin.

El texto es una versión de Brian Friel y actúan Rodolfo Arias, Yael Albores e Izael Almanza; en el violín, Adriana Hernández Forcada.

En la obra, la nueva conquista amorosa de un hombre maduro, experto en la técnica y arte de la seducción, que ocurre en un lugar turístico, pone en entredicho todo su saber al respecto y desencadena entre él y una joven mujer una pasión inusitada.

Escárcega: “Este territorio de paradojas me permitió indagar el ámbito de los personajes.

Es una adaptación del texto de Brian Friel, quien falleció hace pocos meses. A su vez, Friel adaptó un texto de Chejov, quien hizo una narración en tercera persona y aquí es contada a dos voces. Es una especie de concierto actoral, donde además hemos incorporado a una violinista, quien complementa los pasajes emocionales por los que transitan los actores. Es una acompañante que va haciendo comentarios musicales a lo que va sucediendo.

Foto
Escena de la obra, protagonizada por Rodolfo Arias, Yael Albores e Izael Almanza, que se presenta en el teatro HélenicoFoto cortesía de la producción

Contradicciones

Agregó que no hay nada más infructuoso que tratar de dominar las pasiones. “Aquí, el personaje asegura todo el tiempo que tiene la cosa bajo control. Lo afirma, lo señala, pero las cosas que hace van poniendo en evidencia que eso no es así. Se da el reto actoral de jugar con la contradicción de eso, para estar como en una bisagra entre lo latente y lo evidente, para dar a entender que es más importante lo que no decimos que lo que decimos. Para esto Chejov es un maestro. En lo escénico esto es una provocación. Hay una parte de esta historia que pasa mucho por la melancolía, por el recuerdo. Toda está contada por medio de recuerdos.

“Hay un parte fascinante en el cuento original donde él se acerca a ella –que tiene el torso desnudo y se está viendo en el espejo–, le pone las manos en los hombros, y Chejov muestra en el espejo la diferencia de pieles, entre las manos de un hombre de casi 50 años y la piel de una joven. Por eso canciones como 40 y 20 tienen un componente universal. La diferencia está en cómo se manejan, cómo se abordan. Aquí, en el caso de Chejov se trata de una obra mayor y la adaptación de Friel me parece muy interesante. Otra aportación de la obra es que invita a leer el original. Esto complementaría y haría más disfrutable la experiencia teatral.”

El juego de Yalta finalizará temporada el 2 de mayo, en el teatro Helénico. Funciones los lunes, a las 20:30 horas. Localidades, 200 pesos.