Para la primera subasta de energía eléctrica en la que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ofreció contratos de largo plazo para la adquisición de 6.3 millones de megavatios/hora, 6.3 millones de certificados de energía limpia y 500 megavatios de potencia, finalizaron 352 ofertas de venta, con garantía de seriedad de 75 participantes, informó el subsecretario de Electricidad de la Secretaría de Energía, César Emiliano Hernández Ochoa.

Los resultados se darán a conocer a más tardar el martes próximo, luego de que el lunes 29 de marzo se presenten las ofertas económicas. El funcionario calculó que una vez asignados los contratos se generarán en el sector inversiones por entre 50 mil y 80 mil millones de pesos y permitirá un aumento de al menos 2 por ciento de la capacidad instalada del país en un plazo menor a tres años.

La importancia de esta subasta que realizan la Secretaría de Energía y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace), dijo Hernández Ochoa, es que se probará el sistema aplicado a partir de la reforma energética, con reducción en la generación ineficiente que utiliza combustibles fósiles y la incorporación de energía limpia.

En el proceso de subasta, añadió, se hicieron 239 pagos por las bases de licitación, se presentaron 468 ofertas técnicas de 103 participantes en la etapa de precalificación, 450 ofertas técnicas obtuvieron un dictamen favorable y avanzaron 352 ofertas de venta con garantía de seriedad por parte de 75 participantes.

De las propuestas, 72.8 por ciento corresponden a energía solar fotovoltaica; 21.7 por ciento de eólica; 2.8 por ciento de fuentes hidroeléctricas; 1.6 por ciento de cogeneración eficiente; 0.8 por ciento de centrales de ciclo combinado y 0.4 por ciento de energía geotérmica.

Entre las empresas destacables se encuentran la propia Comisión Federal de Electricidad (CFE), que participa como proveedor y comprador; la española Iberdrola, uno de los principales contratistas de la eléctrica mexicana a través de proyectos Pidiregas; Invex Infraestructura, que opera en el ámbito del grupo financiero del mismo nombre; Enel Green Power de México, propiedad de la francesa Grupo Enel; Comexhidro-Innergex, que abastece a la empresa de pinturas Comex, así como Alumbrados y Circuitos de México, General Motors, Envases Universales y gobiernos municipales a través de minihidroeléctricas ubicadas en Jalisco, Michoacán y Guerrero.

Entró a la puja Generadora Fénix, una coinversión con el ex Sindicato de Trabajadores Electricistas (SME), para operar las plantas que le fueron entregadas a esa organización sindical en Necaxa, Patla, Texcapa y Tepexic (Puebla); de Juandho y Cañada (Hidalgo); Lerma (Michoacán); Alameda, Temascaltepec, Fernádez Leal, Villada, Tlílan, San Simón, San Pedro Zistepec, Zepayautla, así como de la termoeléctrica Jorge Luque, en Lechería (estado de México).

Sonora, mercado abierto

Sonora será la primera entidad del país en contar con un mercado abierto a la competencia en la importación, almacenamiento, distribución y venta de gas licuado de petróleo (gas LP) con el arranque de la planta que construye la empresa de capital estadunidense Windstar, en las afueras de Hermosillo, con una inversión de 7 millones de dólares.

Según el director general en México de Widstar, Aniceto Hernández Gayosso, al entrar en operación la nueva planta se creará un mercado abierto a la competencia en una región que consume 40 por ciento del gas LP y que en su mayoría es de importación.

Nuestra empresa lo que hace es subirse a la reforma energética y generar competencia en un mercado que estaba monopolizado por Pemex, dijo.

El proyecto, explicó, pretede adquirir el combustible donde haya, sea en Estados Unidos o Canadá, para transportarlo por ferrocarril hasta Sonora y de ahí distribuirlo a los consumidores de la región Pacífico-norte del país.

El proyecto que se construye a 10 kilómetros al norte de la capital de Sonora y lleva un avance de 55 por ciento, se conoce como Planta de Almacenamiento y Distribución de Gas Licuado de Petróleo.