El secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), Carlos Aceves del Olmo, sostuvo ayer que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (Conasami) está totalmente rebasada por la realidad; no tiene ningún papel preponderante, por lo que incluso la central obrera analiza salirse de dicha comisión.

Puntualizó que es un despropósito y una estupidez que el director de la Conasami, Basilio González, señalara que no se pueden aumentar los sueldos con una varita mágica. Planteó que la fijación de los incrementos a los mínimos es una tarea que bien puede asumir el Congreso de la Unión, y de esta forma se ahorraría el gasto que significa mantener dicho organismo.

En conferencia de prensa aseguró: no tenemos interés en pertenecer a esta comisión porque el salario mínimo ya es una pieza de museo, ya no sirve ni para una boleada de zapatos. Esta instancia, dijo, lo único que ha hecho es poner una camisa de fuerza a todas las organizaciones sindicales del país en las revisiones salariales, ya que el aumento que determina es el techo de las demás negociaciones.

En cuanto a la propuesta del jefe del Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, de fijar el salario mínimo arriba de 86 pesos en el presente año, Aceves del Olmo expuso: primero debería ver hacia dentro de su administración, porque hay miles de trabajadores, por ejemplo los de limpia, que no tienen contrato fijo ni están sindicalizados y les pagan por jornada. No obstante, aclaró: no es lucha de la CTM los salarios mínimos, en esta central ganan más los obreros

Cuestionado respecto del despido de miles de trabajadores del sindicato petrolero, que encabeza Carlos Romero Deschamps, y del Único de Trabajadores Electricistas (Suterm), que dirige Víctor Fuentes, indicó que es una de las consecuencias del proceso de despetrolización que vive el país.

Desde su punto de vista, es fundamental revisar que los empleados sean liquidados conforme a la ley. En relación con los señalamientos contra estos dirigentes, agregó que no se puede llamar corruptos a estos líderes sindicales, quienes están defendiendo las conquistas laborales que obtuvieron en décadas.

El gremio petrolero, planteó Aceves del Olmo, es de origen cetemista, y se alejó de esta confederación (cuando Romero Deschamps quiso dirigir la CTM y no fue apoyado por el comité nacional y eligió a Joaquín Gamboa Pascoe), por lo que no tenemos que estar con ellos. Dijo que en cuanto al tema de las dirigencias y la corrupción, los que ya bailaron que se sienten y que vengan otros.