León, Gto.

Enrique Benjamín Solís Arzola, ex alcalde priísta de Silao, fue vinculado a proceso penal acusado de ordenar amenazas y una golpiza a la periodista Karla Janet Silva Guerrero. Se le dictó prisión preventiva mientras dure el proceso.

Durante la audiencia de imputación efectuada ayer, que duró más de 14 horas, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) presentó como prueba la confesión de Jorge Alejandro Fonseca Durán, ex coordinador operativo de la policía municipal de Silao, quien acusó a Solís Arzola de ordenarle al ex director de policía Nicasio Aguirre Guerrero –aún prófugo– que pusiera un alto a las notas de Karla Silva.

En una ocasión Solís Arzola enseñó a Nicasio Aguirre varios recortes de periódico y le preguntó si podía hacer el trabajo o se lo encargaba a otra persona, según la confesión de Fonseca Durán.

En el expediente contra Solís Arzola la PGJE presentó 196 datos de prueba, entre los que destacan las declaraciones del ex coordinador operativo de la policía municipal, de Luis Gerardo Hernández Valdenegro, uno de los agresores de la comunicadora; de la asistente del director de policía, de periodistas y de familiares de los autores de la golpiza que recibió Silva Guerrero el 4 de septiembre de 2014.

La juez desechó el amparo contra la orden de aprehensión de Enrique Benjamín Solís, pues cuando fue notificada del recurso el ex edil ya había sido detenido y puesto a disposición de la autoridad judicial.

El amparo a Solís Arzola fue emitido por un amigo de éste, el juez décimo de distrito, Guadalupe Bustamante Guerrero.

A mediados de 2015 Guadalupe Bustamante rehusó atender un juicio de amparo tramitado por el Centro Las Libres para obligar al edil de Silao a declarar ante el Ministerio Público por la golpiza a Karla Silva. El juez alegó que tenía una relación de camaradería con Solís Arzola.