Oaxaca, Oax.

Catorce presbíteros de la arquidiócesis de Antequera Oaxaca se pronunciaron en contra del hostigamiento recibido por el padre de la iglesia de la Inmaculada Virgen de Juquila, Manuel Arias Montes, quien denunció que al menos 45 niños indígenas sufrieron abuso sexual por parte del cura Gerardo Silvestre Hernández, preso desde finales de 2013 en el penal de la Villa de Etla.

Mediante una carta pública, los padres de la Iglesia católica acusaron al arzobispo José Luis Chávez Botello, así como al apoderado legal de esa arquidiócesis, Wilfrido Mayrén Peláez, de ser los orquestadores de una campaña de desprestigio y linchamiento contra Arias Montes, quien acusó a Chávez Botello de proteger en el caso de pederastia clerical a Silvestre Hernández.

Los sacerdotes responsabilizaron al jerarca y al apoderado de cualquier agresión que pudieran sufrir. Rechazamos las calumnias de las que ha sido objeto (Arias Montes), su trayectoria demuestra la defensa y respeto a la dignidad de las mujeres y niños, señalaron en la misiva.

Por su parte, el fiscal general del estado, Joaquín Carrillo Ruiz indicó que el padre Gerardo Silvestre Hernández continúa en el proceso derivado de la denuncia por violación de un infante en el municipio de San Pablo Huitzo y señaló que la sentencia la debe dictar el juez que lo consignó.

Añadió que de los más de 45 casos de pederastia clerical de los que ha sido acusado el padre, sólo se recibieron dos denuncias. Ambas fueron investigadas y hasta el momento sólo en un caso se le declaró culpable; el segundo sigue en litigio.