La solución al conflicto árabe israelí puede ser pacífica y estar basada en la coexistencia, no en un estado en lugar de otro, sino en dos estados que van a vivir juntos, dijeron ayer integrantes del Partido Comunista de Israel, Pedro Goldfarb y Afo Agbaria, quienes señalaron que son tratados como traidores, por hacer este tipo de planteamientos.

De visita en México para participar en un congreso organizado por el Partido del Trabajo, los responsables del área internacional y de la oficina para América Latina de esa fuerza política destacaron que se ha tratado de deslegitimar a su organización por proponer un diálogo con los palestinos y que se llegue a un acuerdo de paz duradera.

Lo más fácil es desacreditar y decir que “somos traidores, que pensamos por el mal del país… cuando en realidad lo que hacemos es tratar de darle a nuestros hijos y nietos un futuro mejor, una zona que viva en paz… Estamos cansados de enterrar a nuestros muertos, como los palestinos están cansados de enterrar a los suyos. Queremos terminar con esto de una vez por todas”, subrayaron.

Pedro Goldfarb y Afo Agbaria recordaron que a partir de la llegada de la derecha al poder en su país, la situación se ha complicada. El gobierno de Israel está actuando de una forma discriminatoria y haciendo todo lo posible para no encontrar una solución aceptable al problema palestino.

Contra esa posición, señalaron en entrevista, se tienen propuestas claras que, estimaron, serían apoyadas por la mayoría de los partidos en el mundo. Entre ellas se encuentra la retirada de Israel de todos los territorios ocupados tras la Guerra de los Seis Días, el desmantelamiento total de todas las colonias ubicadas en Cisjordania y el establecimiento de dos estados libres, independientes y soberanos.

Sin embargo, subrayaron que su lucha no es fácil y que miembros de su partido y de otros sectores de la sociedad, como intelectuales y periodistas, han sido amenazados de muerte por promover ese camino.

En este contexto, resaltaron que autoridades israelíes impulsan leyes antidemocráticas que implican la posibilidad de sacar fuera del parlamento a grupos políticos que intentan llegar a un acuerdo de paz con los palestinos.

Pero puntualizaron que ello en lugar de amedrentarlos los obliga a continuar con su lucha política.