Desde la cuna del blues narra la historia de la música estadunidense
Sábado 5 de marzo de 2016, p. 7
Jackson, Misisipi.
Un segundo Museo del Grammy, el primero afuera de Los Ángeles, abre este sábado en el delta del Misisipi, la cuna del blues.
Los organizadores escogieron Cleveland, Misisipi –dos horas al norte de la capital estatal de Jackson– para el proyecto de casi 20 millones de dólares y prometen uno de los museos más modernos del país. Es una versión más pequeña pero actualizada de su museo hermano en California y emplea pantallas táctiles de alta definición y tecnología interactiva para narrar la historia de la música estadunidense desde antes de la primera entrega del Grammy en 1959 hasta el presente.
La base de esa historia es el delta del Misisipi, dijo Bob Santelli, director ejecutivo del Museo del Grammy en Los Ángeles. La guitarra rítmica y las conmovedoras baladas de intérpretes de blues como Robert Johnson y B.B. King se propagaron por el Misi-sipi y todo el país, influyendo sobre casi todos los estilos musicales populares en Estados Unidos: el jazz, el hip hop, el rocanrol. El estado también cuenta con el mayor número de ganadores de Grammy per cápita en el mundo.
¿No es increíble?
, dijo Santelli. Si sacas al estado de Misisipi de la historia de la música estadunidense te queda una gran brecha que llenar
.
El museo, el edificio más exclusivo del estado, fue diseñado con la historia del delta en mente. El metal corrugado en el exterior es un saludo a las casas rústicas de hojalata en las que muchos músicos de blues crecieron. La entrada luce como un gran pórtico, característica común en muchas casas del delta.
El director de la Cámara de Comercio de Cleveland, Judson Thigpen, calcula que el museo podría generar a toda la región unos 20 millones de dólares anuales en turismo.
La variada colección del museo incluye desde emblemáticas guitarras acústicas que Presley tocó en los años 50 hasta el brillante traje de plumas multicolor que CeeLo Green usó en los Grammy en 2011.
El cantante pop Ne-Yo enseña pasos de baile en una enorme pantalla frente a una pista de baile de luces como las que Michael Jackson usó en el video de Billie Jean. Una cabina permite a los visitantes oír cómo Beyonce sonaría en un gramófono.
Los asistentes también podrán grabar y producir una canción con el músico de blues laureado con el Grammy Keb’ Mo’ y rastrear cómo nativos de Misisipi como Ike Turner –considerado el padre del rocanrol– influyeron a músicos a lo largo de los años.