Soberbia actuación del portero Tiago Volpi; el global fue 3-1
Miércoles 2 de marzo de 2016, p. 9
Washington.
Con destacada actuación del portero Tiago Volpi, Querétaro, en su primera incursión en un torneo internacional, se instaló en las semifinales de la Concachampions, tras empatar 1-1 con el DC United, al que eliminó con global 3-1.
Muy temprano los Gallos Blancos pusieron contra la pared a su rival, que perdió en el juego de ida (2-0), porque al minuto tres Ángel Sepúlveda aprovechó un recentro del Édgar Pájaro Benítez y con fino toque raso decretó el 0-1.
El conjunto mexicano dominó sin problemas el juego, porque además su defensa estuvo atenta y bien ubicada para complicar la actuación de la delantera local, que halló pocos huecos, uno de ellos al minuto 11, cuando Marcelo Sarvas sacó un tiro que iba para gol, pero el guardameta de los emplumados se lanzó correcto para desviar.
Benítez fue la punta de lanza del Querétaro, con su habilidad y rápidas descolgadas mantuvo en jaque a los de Washington. Estuvo cerca de marcar el segundo tanto al minuto 26, pero el portero Andrew Dykstra frustró el intento con una gran atajada.
El brasileño Volpi destacó en el complemento con soberbias atajadas. Al minuto 52 hundió en la frustración a Fabián Espíndola; primero rechazó su disparo con los pies, enseguida se recuperó y le achicó perfecto para hacerlo errar.
El portero de los Gallos se vistió de héroe al 55, cuando el árbitro panameño John Pitti marcó dudoso penal. Al cobro fue Chris Rolfe pero Volpi se lanzó a la derecha y desvió tras su impresionante vuelo.
El equipo queretano intentó sobrellevar los últimos minutos, pero se confió y fue empatado.
Al 75 el timonel local Ben Olsen mandó al campo al alemán Julien Büscher, quien al 83 aprovechó la pasividad de la zaga de los Gallos y disparó un cañonazo que pegó en el poste para el 1-1.
Horas antes del partido la directiva del Querétaro emitió un boletín en el que subraya que no encontró evidencias del presunto robo de cuatro celulares a jugadores del DC, ocurrido el 22 de febrero en el vestidor de visitantes del estadio Corregidora durante el partido de ida.
No obstante, decidió pagar los aparatos al confiar en la palabra del personal del DC United
.