Las denuncias se conocieron tras el escándalo del obispo Vangheluwe
Martes 23 de febrero de 2016, p. 35
Bruselas.
La Iglesia católica en Bélgica recibió desde 2012 unas 400 denuncias de personas quienes aseguraron que cuando eran menores de edad sufrieron abusos sexuales por sacerdotes, afirmaron este lunes autoridades eclesiástica.
El anuncio fue hecho casi seis años después de un enorme escándalo de pedofilia en la institución. En abril de 2010, el ex obispo de Brujas Roger Vangheluwe confesó haber abusado de dos de sus sobrinos, y dimitió.
En lo sucesivo emergieron miles de testimonios sobre abusos cometidos desde hacía décadas por sacerdotes o miembros de congregaciones religiosas en Bélgica.
Acusada de guardar silencio, la Iglesia belga decidió a comienzos de 2012 apostar por la transparencia e invitó a las víctimas a darse a conocer, a través de 10 puntos de contacto
, prometiendo además una indemnización.
En 2012, 286 personas se manifestaron en uno de estos puntos de contacto. En 2013 fueron 37 y para 2014-2015 la cifra llegó a 95. Es decir, un total de 418, indicaron en conferencia de prensa el obispo de Tournai, Guy Harpigny, y el de Amberes, Johan Bonny.
En 80 por ciento de los casos, los hechos denunciados ocurrieron hace más de 30 años. Cerca de la mitad, es decir, 43 por ciento, se produjeron en escuelas, y alrededor de 25 por ciento en las parroquias, según el informe anual de las iniciativas tomadas por la Iglesia en este ámbito.
En el momento de los hechos, 89 por ciento de las presuntas víctimas tenían menos de 18 años, y 23 por ciento menos de 10.