Dalias
ntre las flores de origen mexicano destaca la dalia por sus variados y brillantes colores. Las hay sencillas como la Dhalia coccinea, antepasada silvestre de las dalias actuales; tiene pocos pétalos y crece en el campo. Sus colores varían entre el lila, el naranja, el amarillo y el rojo. A partir de esta dalia se han generado más de 50 mil distintas variedades en el mundo. Casi no hay país donde no se haya propagado la dalia que suele ser, como ocurre con tantas otras cosas, más apreciada en el extranjero que en su lugar de origen.
Hay evidencia de su presencia en piedras talladas por los antiguos xochimilcas, como puede verse en el Museo Arqueológico de esa delegación. Su nombre en náhuatl es acocoxóchitl, que significa flor de tallos de agua. Se le menciona en el Códice Martín de la Cruz Badiano y en la Historia general de las cosas de Nueva España, de Bernardino de Sahagún, donde se refiere el uso de su raíz molida tomada en ayunas como auxiliar para la digestión, entre otras cosas.
En su Historia natural de Nueva España, Francisco Hernández escribe que su raíz era usada contra los cólicos y la flatulencia
; también como antiespasmódica, catártica, diaforética, diurética, tóxica y antitusígena
. En la actualidad los mixtecos de Oaxaca comen sus bulbos, según reporta el investigador Robert Bye.
Las primeras semillas de dalia debieron llegar a Europa en el siglo XVI, pero no fue sino hasta principios del siglo XIX que se popularizó allá esta planta, gracias a la difusión que de sus semillas hizo Alejandro de Humboldt.
El 13 de mayo de 1963 se declaró a la dalia símbolo de la floricultura nacional en todas sus especies y variedades
mediante un decreto presidencial; como un apoyo adicional, la Universidad Autónoma Chapingo y diversos investigadores generaron la iniciativa de establecer el 4 de agosto como el Día Nacional de la Dalia. Es justamente por esas fechas cuando las flores rojas, moradas, amarillas, lilas, rojas, naranjas están en su apogeo y se lleva a cabo la exposición de la dalia en los Viveros de Coyoacán.
Su uso en la cocina se ha difundido a través de la Universidad Autónoma Chapingo, la Asociación Mexicana de la Dalia o Acocoxóchitl y el Sistema Nacional de Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (Sinarefi). Se ha comprobado que las flores contienen antioxidantes naturales. En la raíz o camote hay inulina que se convierte en fructosa durante la digestión, lo que contribuye a controlar el nivel de glucosa; esto es positivo para los diabéticos. (V. http://snics.sagarpa.gob.mx/ documents/programa_mna.pdf). De las recetas escribiremos después.