Sábado 20 de febrero de 2016, p. 17
La Paz.
El jefe de la policía de la ciudad de El Alto, José Peña, fue destituido ayer para ser investigado por negligencia, luego de la muerte de seis personas durante el incendio del ayuntamiento. Manifestantes que el miércoles pasado exigían mejoras para infraestructura escolar prendieron fuego al inmueble.
La protesta de la Federación de Padres de Familia movilizó a unas 10 mil personas hasta el edificio municipal. Reclamaban la construcción de más aulas y dotación de mobiliario para escuelas de 565 barrios de El Alto, segunda ciudad más poblada de Bolivia, vecina a La Paz.
La protesta devino vandalismo con el saqueo de documentos, muebles, computadoras y la posterior quema del inmueble.
La ayuda de la policía llegó dos horas después de la primera alerta. En el interior había unos 150 funcionarios, impedidos para abandonar el recinto porque en el único acceso al exterior ardían papeles, muebles de madera y computadoras.
La justificación
El jefe de la policía boliviana, Édgar Ramiro Téllez, quien informó que Peña será remplazado por Hugo Morales Luján, justificó la ausencia policial diciendo que ese día hubo actos con el presidente Evo Morales y el vicepresidente Álvaro García Linera, así como una marcha de estudiantes de la universidad pública de El Alto.
Los tribunales de justicia definirán también la situación de siete arrestados el jueves en operativos policiacos.
El incidente se produce en la víspera de la celebración del referendo sobre la reforma constitucional que abriría el camino a otra postulación del presidente Evo Morales para los comicios de 2019.
Morales instó ayer al equipo de gobierno y al pueblo a trabajar por el futuro del país tras la celebración del referendo del domingo. Anunció que el 26 de febrero se efectuará una reunión con ministros, viceministros y gerentes de empresas públicas para retomar la senda del desarrollo nacional.
Las campañas políticas roban tiempo, pero lo importante en Bolivia es la política de servir, pues terminada la consulta vamos a trabajar más para el pueblo
, indicó.
Observadores de la Unión de Naciones Sudamericanas aseguraron que existen condiciones para el buen desarrollo de la consulta. Unas 6.5 millones de personas están convocadas a las urnas.