Su llegada coincide con aniversario del golpe de Estado de 1976
Sábado 20 de febrero de 2016, p. 17
Buenos Aires
El Premio Nobel de la Paz argentino 1980, Adolfo Pérez Esquivel anunció este viernes que solicitará al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que retrase su viaje a este país programado para el 24 de marzo, fecha que coincide con el 40 aniversario del golpe de Estado de 1976.
El jueves la canciller Susana Malcorra ratificó la fecha de la visita ante lo cual la presidenta de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini consideró que esta fecha aparecía como un provocación
cuando se sabe que ese es el día en que marchan todos los organismos de derechos humanos que convergen en la Plaza de Mayo, lugar donde iniciaron las madres de desaparecidos la resistencia a la dictadura militar (1976-1983) y el reclamo de aparición de los miles de secuestrados desaparecidos.
De la misma manera, Nora Cortiña de Madres Fundadoras de Plaza de Mayo advirtió que es muy fuerte
que se haya elegido esta fecha " y los organismos dudan ahora de si no se trata de una acción “premeditada" del gobierno del derechista presidente Mauricio Macri para evitar lo que todos saben será una de las marchas más importantes, debido a que es evidente una política de desmantelamiento de los grandes logros en derechos humanos en el país.
Cortiñas consideró como una perversidad
que se eligiera esa fecha, ya que nadie ignora el papel de Estados Unidos en respaldar a las dictaduras militares más terribles de la región en los años 70, como se ha comprobado documentalmente
.
Pérez Esquivel recordó que fue el golpe militar de 1976 bajo el amparo y el visto bueno de Estados Unidos el que instaló el terrorismo de Estado en el país, provocando miles de muertos desaparecidos, torturados, y exiliados.
No estoy diciendo que no venga, ni dejando de reconocer medidas importantes tomadas por Obama en estos años sino que creo que el viaje podría retrasarse para un día después, ya que el próximo 24 de marzo se realizarán grandes movilizaciones en el país
y se han logrado acuerdos para unificar a todas las fuerzas en momentos de graves amenazas para la política de derechos humanos, que se aplicó en la última década.
Recientemente, Claudio Avruj, ex dirigente de la ultraderechista Delegación de Asociaciones Israelitas-Argentinas (DAIA) recibió nada menos que en la Escuela de Mecánica de la Armada, donde los militares desaparecieron a unas 5 mil personas, a los abogados que defienden a acusados por delitos de lesa humanidad, varios ya condenados con suficientes pruebas y testimonios de las víctimas y sus familiares.
Nos preocupan las situaciones que puedan darse, especialmente en esa fecha tan sensible cuando han sucedido hechos muy graves como las intervenciones a los archivos de la memoria, y otros datos que vuelven atrás lo logrado en la larga lucha de los organismos. Es llevar a situaciones límites, sin ninguna necesidad, y es posible que Obama no haya sido debidamente informado del significado de esta fecha para el pueblo argentino y la región
, dijo Pérez Esquivel.
En tanto, continúan las reacciones de diversos sectores por el Protocolo de Seguridad
anunciado por la ministra de esa área Patricia Bullrich, quien ante una advertencia del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) dijo que ese organismo no sabe leer. Lee lo que le conviene y tiene una actitud beligerante y de obstrucción
en entrevista con el Diario La Nación.
El CELS respondió que en la aplicación de ese Protocolo de actuación de las fuerzas de seguridad del Estado en manifestaciones pública. “están en juego aspectos esenciales de la democracia y su aplicación afecta los derechos a la vida, a la integridad, de reunión, de petición a las autoridades y la libertad de expresión (...) el nuevo protocolo no prohíbe la portación de armas de fuego de los policías que pudieran entrar en contacto con manifestantes.
Bullrich pretendió aclarar esta omisión diciendo que los efectivos de seguridad que se encuentren en la primera línea de la represión utilizarán armas no letales
. Sin embargo, no hay ni en el texto de la resolución ni en las declaraciones de la ministra ninguna referencia a con qué criterios se utilizarán estas armas ni qué controles habrá.
Se trata de un cambio de política alarmante ya que las llamadas armas no letales
, entre ellas las balas de goma, producen heridas graves y pueden matar, como ocurrió en el caso del maestro Carlos Fuentealba en 2007.
Y en torno a la cobertura periodística el organismo expresa que son evidentes las consecuencias de que las fuerzas de seguridad prioricen el desalojo del espacio público por encima de la vida y la integridad física. En todas estas ocasiones el registro fotográfico y audiovisual fue fundamental para denunciar e investigar los hechos y las responsabilidades de los funcionarios.
El nuevo protocolo también restringe esta posibilidad al limitar la tarea de los trabajadores de prensa en la cobertura de las protestas.