La Cámara de Diputados mantiene en el archivo nueve cuentas públicas de los gobiernos de Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto. Hoy, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) presentará en San Lázaro la de 2014, que contiene el resultado de mil 659 auditorías y estudios aplicados al gasto del segundo año de gobierno de la administración actual.

Durante el primer sexenio panista ese partido impidió que las cuentas del gobierno de Vicente Fox de 2003, 2004, 2005 y 2006 fueran dictaminadas, a pesar de las presiones de la oposición en el Congreso.

Situación similar se vivió en el segundo sexenio panista, encabezado por Felipe Calderón Hinojosa. Se impidió la revisión y análisis de las cuentas de 2010, 2011 y 2012.

Luego de que el PRI recuperó el poder presidencial, la Cámara de Diputados dejó de dictaminar la de 2013.

La preocupación imperante en los órganos de fiscalización por las omisiones de la Cámara de Diputados radica en el crecimiento exponencial del gasto público durante los últimos 15 años.

En 2000, el presupuesto aprobado por la Cámara de Diputados ascendió a un billón 179 mil 562 millones de pesos. Con Felipe Calderón en la Presidencia, el gasto público se incrementó en 2009 a 3 billones 45 mil 478 millones, y en 2014 el PEF se ubicó en 4 billones 467 mil 225 millones.

Desde entonces la ASF elaboró una lista de los rubros con mayor incidencia en irregularidades, en las que incurren todos los entes fiscalizados: carencia de indicadores e incumplimiento en la elaboración de sus reportes; omisión de objetivos y metas; deficiencia de información sobre recursos federales transferidos a estados y municipios; pagos improcedentes y en exceso para obra pública; falta de documentación comprobatoria y de recursos utilizados para crear fideicomisos, mandatos y contratos análogos.

La lista de deficiencias en la revisión del gasto público también contempla el incumplimiento de disposiciones normativas, inadecuada formalización de contratos, convenios o pedidos en procesos de adquisición, arrendamiento y servicios; supresión de retenciones y entero de impuestos o cuotas en el pago de servicios profesionales, y reporte extemporáneo del sistema de información y registros.

Sobre el particular, el diputado perredista Julio Saldaña Morán presentó un punto de acuerdo de urgente y obvia resolución, el cual exhorta a la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados a dictaminar las cuentas pendientes de los ejercicios fiscales 2003, 2004, 2005, 2006, 2010, 2011, 2012 y 2013.

La omisión y opacidad provocada por dicha circunstancia implica riesgos en las finanzas públicas, por la existencia de gastos que son aplicados de manera inadecuada o inercial. Así se han generado las condiciones propicias para que los recursos públicos sean utilizados fuera de lo dispuesto en las normas y las metas y propuestas de programas no se alcancen, con la consecuente afectación de la imagen que la sociedad tiene del gobierno federal.

Por tanto, es escasa la información sobre los beneficiarios de los programas sociales, las adquisiciones y las contrataciones. Si bien cumplen la norma, no representan las mejores condiciones para el Estado; los proyectos de infraestructura se materializan sin planeación, supervisión y seguimiento, y se fomenta la intermediación por la dispersión del gasto público y el incremento de los subejercicios.

También desde 2000 y hasta 2014 la ASF ha presentado 656 denuncias de hechos.

Por su parte, el diputado Jorge López Martín (PAN) denunció el excesivo sobreendeudamiento de los estados.

El legislador expresó que los informes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público manifiestan el incremento de los empréstitos adoptados por las entidades del país, por lo que es necesario, dijo, que el Senado de la República dé trámite a la Ley de Disciplina Financiera, aprobada por la Cámara de Diputados en el pasado periodo ordinario de sesiones.