Una semana después del homicidio de Anabel Flores Salazar, reportera veracruzana de El Sol de Orizaba, Miguel Ángel Mauss, jefe de información del diario El Buen Tono, que se edita en Córdoba, denunció haber recibido amenazas de muerte.

En Veracruz, la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas recibió la queja del comunicador ayer por la mañana, e inmediatamente Mauss recibió protección policiaca, en tanto se analiza el nivel de riesgo que enfrenta.

Anabel Flores, quien fue secuestrada de su vivienda la madrugada del lunes 8 de enero y su cuerpo hallado la mañana del día siguiente en Puebla, trabajó para El Buen Tono.

En 2011 parte de las instalaciones de ese rotativo fueron incendiadas por un grupo armado que irrumpió en el inmueble. Los delincuentes destruyeron la redacción y le prendieron fuego.

En este contexto, José Abella García, director de El Buen Tono, protagoniza una controversia con Jorge Reyes Peralta, presidente del Colegio Nacional de Abogados Penalistas, a partir de una fotografía difundida en las redes sociales en la que se observa a Abella García rodeado de gente armada en una zona boscosa.

Reyes Peralta exigió a la Procuraduría General de la República que investigue a José Abella, una persona que sirve a cualquier interés, manda a sus reporteros a servirle a la delincuencia organizada, y cuando los capturan los desconoce, pero él los manda y se beneficia de ellos.

El abogado lo acusó de ser el autor de la quema de su propio periódico y de estar coludido con la delincuencia organizada. Exigimos una investigación seria; Abella García es un delincuente, afirmó.

Agreden a periodista en Coahuila

Carmen Villa, reportera de los periódicos Zócalo y Calibre 57, que se editan en Saltillo, Coahuila, denunció ante la Procuraduría General de Justicia del Estado haber sido agredida físicamente por dos agentes de la dirección de seguridad pública municipal luego de que los fotografió mientras golpeaban a un sujeto detenido en una riña.

Relató que el pasado domingo los policías –un varón y una mujer que tripulaban las patrullas 12736 y 13775– la empujaron y le quisieron arrebatar la cámara que llevaba colgada al cuello, en la calle Julio Cervantes de la colonia Bellavista, al sur de la capital coahuilense.

La denuncia la recibió un agente del Ministerio Público adscrito a la Subprocuraduría de Investigaciones Especializadas, Atención y Protección a Víctimas y Testigos, en contra de quienes resulten responsables, y quedó establecida en el expediente 01866/sal/2016, por el delito de abuso de autoridad y lesiones.