Guadalajara.

Una ensordecedora silbatina despidió a las Chivas rumbo al vestidor tras la nueva derrota que esta vez exasperó a su público. Ni el cambio de horario ni la gran entrada que hizo la afición en el estadio Omnilife fueron suficientes para motivar al extraviado Guadalajara, que sumó su noveno partido sin triunfo y cayó 0-1 frente al León.

El argentino Mauro Boselli fue autor del único tanto, al minuto 78. Con este resultado, los de Guanajuato sumaron 12 unidades, en tanto que el Rebaño tiene cuatro unidades de 18 posibles, en la fecha seis del torneo Clausura 2016. Tres de sus encuentros sin ganar corresponden a la campaña anterior.

Al cuadro tapatío nada le funciona: su ataque carece de convicción y profundidad; tiene posesión del esférico, explota por los costados, pero no sabe concretar. El flamante refuerzo Carlos Peña sigue sin encontrarse, sin sumar. A Carlos Cisneros no le llegan balones a modo, mientras el capitán Omar Bravo anda desatinado. Hasta el explosivo Orbelín Pineda se apagó.

Al colapso se agregó el portero José Antonio Rodríguez, quien anduvo mal y de malas. En su reaparición tras su ausencia por lesión, falló en el momento menos oportuno para permitir el gol de la derrota. Y si algo faltaba, Jair Pereira se hizo expulsar por reclamos tras la anotación.

El equipo visitante, todavía en proceso de adaptación a su nuevo técnico, Luis Fernando Tena, tardó en aprovechar todas las facilidades de su rival. Durante gran parte del encuentro cedió la iniciativa al Rebaño Sagrado, asomándose tibiamente a territorio enemigo.

Sin embargo, poco a poco fue midiendo al rival y se convenció de las posibilidades de llevarse más que un empate, a pesar de la lesión tempranera de Diego Novaretti, quien se vio obligado a dejar la cancha, además de la ausencia en este partido, también por lesión, de Luis Montes.

El primer tiempo fue un martirio para el público, que desde entonces despidió a los rojiblancos con una silbatina que no consiguió sacudirlos.

Para el complemento, dentro de su desesperación, el técnico local Matías Almeyda ordenó los ingresos de Michael Pérez, Ángel Zaldívar y Marco Granados, movimientos que no fueron suficientes para impedir que los Panzas Verdes tomaran la manija del juego y se adueñaran del balón.

Los pupilos de Tena ya habían dado más de un aviso, pero fue al minuto 78 que terminaron con el cero en un tiro de esquina por la derecha que Ignacio González recentró a la ubicación de Boselli, quien cubrió muy bien el esférico, ante una tibia salida de Rodríguez, para definir de media vuelta.

Tras el gol, Jair Pereira se excedió en los reclamos al árbitro Fernando Guerrero para ganarse la tarjeta roja y dejar así con 10 hombres a Chivas.

El triste Rebaño tuvo que cargar con una nueva derrota que agudiza su crisis sin visos de solución.

Guerrero tuvo buena labor. Expulsó de roja directa a Pereira, además de amonestar a Omar Bravo (30), Michael Pérez (76), Carlos Cisneros (86) y Carlos Salcedo (94) por los de casa. El colombiano Hernán Burbano (31), Ignacio González (67) y Aldo Rocha (74) vieron cartón preventivo por el cuadro visitante.

El técnico Almeyda aseguró que su equipo ya no puede caer más bajo. Me doy cuenta de que es un momento donde tocamos fondo; Chivas tocó fondo y debe ser un resorte para saltar arriba. ¿Cómo se logra eso? Cambiando y viendo quién está en plena disposición y con ganas de sacar esto adelante.

Se declaró responsable del mal momento que atraviesa el equipo, pero anticipó que vendrán cambios importantes. Asumo toda responsabilidad hasta hoy por dar posibilidad a los jugadores; a partir del partido siguiente empezaré a cambiar y veré todas las maneras de sacar esto adelante. La vida continúa y mientras tenga chance de trabajar, trabajaré, sostuvo.

Tena señaló que se siente más tranquilo “porque empezamos en casa y perdimos; además de los tres puntos era importante ganar credibilidad con los jugadores, con la gente, y que los futbolistas sepan que tienen buenos técnicos enfrente; nos vamos con tres puntos y algo más de este precioso estadio.

El equipo venía de dos derrotas y nos cae bien un triunfo así. Vi un partido parejo, sabíamos que su ansiedad les jugaría en contra y afortunadamente cayó el gol, concluyó.