Viernes 12 de febrero de 2016, p. 5
El enfrentamiento en el penal de Topo Chico ha sido el más cruento que ha ocurrido en cárceles del país, con 49 muertos, cinco de ellos calcinados, y cuatro heridos de gravedad.
La cifra más alta de fallecidos en riñas, motines o fugas en prisiones era la registrada el 19 de febrero de 2012, cuando 44 reclusos del cártel del Golfo fueron asesinados por sicarios rivales de Los Zetas, en el penal de Apodaca, también en Nuevo León.
El 4 de enero de 2012, 31 convictos perdieron la vida y 13 resultaron heridos en una refriega entre bandas de internos en el centro penitenciario de Altamira, Tamaulipas.
El 14 de junio de 2010, 29 reos murieron en un enfrentamiento en el reclusorio de Mazatlán, Sinaloa.
El 18 de diciembre de 2013, un intento de fuga y motín en la cárcel de Gómez Palacio, Durango, dejó 24 muertos: 15 presos y nueve convictos.
El 4 de marzo de 2009, reclusos pertenecientes a la pandilla de Los Aztecas (del cártel de Juárez) asesinaron a 22 convictos de la banda Artistas asesinos (del cártel de Sinaloa).
El 20 de enero de 2011, 23 presos perecieron en una riña en la penitenciaría de la ciudad de Durango.
El 20 de octubre de 2011, una disputa entre grupos antagónicos de reclusos en el centro penitenciario de Reynosa, Tamaulipas, cobró la vida de 21 personas.
El 15 de octubre de 2011, una pelea entre reos en la prisión de la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, dejó 20 muertos y 12 heridos.