Miércoles 10 de febrero de 2016, p. 2
Washington. La cifra de ataques de tiburones en el mundo registró un récord en 2015, cuando se contabilizaron 98 no provocados contra personas, según un informe de investigadores de la Universidad de Florida. Seis fueron mortales, señala el informe presentado el lunes pasado. El hasta ahora mayor número de ataques de esos animales no provocados (es decir, no atraídos con comida o al intentar tocarlos o cazarlos) se había registrado en 2000, con 88. Los investigadores atribuyeron el aumento al crecimiento de la población mundial y a que cada vez más gente acude a las playas. Sin embargo, el número de tiburones sigue reduciéndose o continúa en un nivel muy bajo debido a la sobrepesca y a la pérdida del hábitat. El aumento no se considera consecuencia de una mayor agresividad, señalan los investigadores que gestionan la base de datos International Shark Attack File. Especialmente amenazados por esos ataques se encuentran surfistas y otros deportistas que entran al agua con tablas y sufren 49 por ciento de los ataques. Normalmente los tiburones confunden las tablas con focas que se quieren comer.