El Gobierno de la Ciudad de México vigilará que el aumento en el precio de los productos de la canasta básica no genere un proceso de especulación que afecte aún más el bolsillo de las familias capitalinas.

José Luis Rodríguez, director de Abasto, Comercio y Distribución, explicó que el alza en los precios de frutas y verduras responde principalmente a factores climáticos.

La quema de cultivos por el frío o la pérdida por los bruscos cambios de temperatura han provocado que la cebolla, el jitomate y el plátano se vendan caros, sobre todo en tiendas de autoservicio.

A ello se suma la diferencia de precios de entre 20 y 60 por ciento en que se vende en los 329 mercados públicos, las 10 rutas de mercados sobrerruedas y la Central de Abasto respecto de centros comerciales.

Tan sólo la canasta de 100 productos que elabora mensualmente la Secretaría de Desarrollo Económico, que incluye además de alimentos, productos de higiene personal y limpieza para el hogar, tiene un costo de 2 mil 900 pesos en mercados, equivalente a 39.70 salarios mínimos.

Mientras, en una tienda de autoservicios se cotiza en 3 mil 286 pesos, lo cual significaría gastar 44.9 salarios en adquirirla, al venderse 386 pesos más cara, por lo que este comparativo ayuda a las amas de casa a elegir el mejor lugar de compra.

Reconoció que los martes y miércoles de plaza, así como la aceptación de vales y tarjetas de crédito, provocan que se acuda a esos centros, pero vigilaremos que no haya actos de especulación.