Creará un observatorio con académicos, empresarios y ciudadanos
Miércoles 10 de febrero de 2016, p. 34
El Gobierno de la Ciudad de México abrirá a la academia, los empresarios y la sociedad civil organizada la operación de sus programas sociales para que se puedan cerciorar de que se aplican de manera transparente, honrada y eficiente, señaló el titular de la Secretaría de Desarrollo Social en la capital, José Ramón Amieva Gálvez.
Para tal efecto, explicó, en breve se instalará un observatorio integrado por representantes de esos tres sectores, así como contralores ciudadanos, que tendrán acceso a toda la información de los programas, pero de manera especial acompañarán la entrega de los apoyos a los derechohabientes.
Que conozcan los programas, los presupuestos, pero sobre todo que estén presentes en el momento en que se entregan los apoyos para que vean que se hace de manera eficiente, en tiempo y a quien lo necesita
, manifestó el funcionario.
En esta instancia, señaló, participarán la Universidad Autónoma Metropolitana, el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, la Confederación Patronal de la República Mexicana y dos agrupaciones de la sociedad civil relacionadas con el tema de la transparencia, las cuales se está por definir.
Además, agregó, la Contraloría General capitalina hizo una convocatoria de contralores, que no son empleados del gobierno sino ciudadanos, a los que se les da la facultad administrativa de revisar y denunciar irregularidades en la operación de los programas sociales.
Halo de publicidad
Amieva Gálvez dijo que con este observatorio más que generar un mecanismo de protección de esas estrategias de gobierno, creará un halo de publicidad
al abrir toda la información y operación a la academia, el sector empresarial y la sociedad civil, acompañados de la contraloría, con los procedimientos que ellos crean necesarios.
Nuestro principio no es que los programas sociales generen una situación de desvío, ineficiencia y corrupción. El principio que tenemos en esta ciudad es que los programas se están aplicando con transparencia, de una manera honrada, eficiente y ordenada
y si en su acompañamiento estos sectores encuentran alguna irregularidad, de manera inmediata se someta al procedimiento correctivo y disciplinario
correspondiente.