A pesar del histórico contrato firmado entre la Secretaría de Marina (Semar) y Petróleos Mexicanos (Pemex) para la construcción de 19 embarcaciones, firmado en el presente sexenio, en lo que respecta al proceso de renovación de la flota naval de la Armada de México los resultados no han sido los esperados, ya que la fabricación de las 62 fragatas, buques oceánicos, patrullas interceptoras y otras embarcaciones necesarias tiene un avance de sólo 12 por ciento.

El director general de Construcciones Navales de la Secretaría de Marina, almirante José Antonio Sierra Rodríguez, señaló lo anterior y agregó que en lo que respecta a la construcción de los barcos para Pemex, se incluyó a tres astilleros privados, aunque se incumplió la meta de involucrar más a constructores ajenos al Estado.

Explicó que inicialmente la Secretaría de Marina contemplaba que la participación de la iniciativa privada fuera de 49 por ciento, sin embargo, los particulares sólo tomarán parte en 32 por ciento del proyecto, ya que desafortunadamente algunos astilleros no pudieron validar las capacidades mínimas indispensables para participar, por lo que no pudieron hacer frente a este compromiso.

Según información oficial, los cinco astilleros con los que cuenta la Armada de México (en Tampico, Tamaulipas; Salina Cruz, Oaxaca; Guaymas, Sonora; Coatzacoalcos, Veracruz, y Acapulco, Guerrero) tienen la misión principal de construir buques y patrullas interceptoras para la flota naval, además de dar mantenimiento a embarcaciones propias y externas.

Así, en la administración del presidente Enrique Peña Nieto la falta de recursos para el Programa de Renovación de la Flota Naval se ha traducido en que los astilleros de la Armada hayan dejado en segundo término la construcción de las naves necesarias para la vigilancia y salvaguarda de los casi 3 millones de kilómetros de mar patrimonial con que cuenta el país.

De acuerdo con el almirante Sierra Rodríguez, el Programa de Renovación de Buques de la Semar (2012-2018) tenía previsto construir 62 buques, de los cuales sólo seis han sido entregados (cuatro buques patrulla costera y dos patrullas interceptoras Polaris II). Siete están en construcción (dos buques de vigilancia oceánica, cuatro buques patrulla costera y un buque de apoyo logístico).

Cuando la meta para 2018 es construir cuatro buques de vigilancia oceánica, 20 buques patrulla costera, 16 patrullas interceptoras tipo Polaris II y un buque logístico.

Del resto de embarcaciones previstas: fragata multipropósito (una), buque de apoyo logístico para aprovisionamiento insular (dos), buque de apoyo logístico para aprovisionamiento costero (dos), buque remolcador de altura (cuatro), buque tanque auxiliar (dos), embarcaciones hidrográficas (cuatro) y buque para transporte de personal (seis), ni siquiera han iniciado su construcción.

El almirante señala que según el plan original, en el presente sexenio se pretendía renovar 36 por ciento de la flota naval de Semar, pero el avance total es de sólo 12 por ciento, debido a que no se han asignado recursos.

Respecto de Pemex, si bien el contrato original firmado por la Semar contemplaba la construcción de 22 embarcaciones, actualmente se construyen 19 por un monto total de 210 millones 876 mil euros.

Sierra Rodríguez explicó que el precio ofrecido por cada buque contempla un margen de riesgo por las variaciones del peso frente a las divisas extranjeras, mas no un factor de ganancia o utilidad, esto con el fin de presentar una propuesta competitiva a Pemex para reactivar así la industria naval nacional.

Sostuvo que los beneficios de este proyecto son tangibles, ya que se generaron empleos directos e indirectos, además de que el personal de los astilleros participantes (además de los de la Semar, los privados Talleres Navales del Golfo y Servicios Navales e Industriales) adquirieron la experiencia necesaria para futuros proyectos.

Actualmente, el avance en la construcción de 16 remolcadores y tres embarcaciones multipropósito (que por su tamaño y construcción tienen costos unitarios que van de los 6 millones 650 mil euros a los 18 millones 900 mil euros, es de 35 por ciento en poco más de un año de que se puso en marcha el acuerdo entre la Semar y Pemex.