Vendieron las jubilaciones de los trabajadores de Pemex por unos cuantos pesos, ya que en la negociación de la reforma energética el gobierno federal condicionó asumir el pasivo laboral de la empresa así: por cada tres pesos que se ahorre en ese rubro, la Secretaría de Hacienda otorgará uno a la petrolera.

La Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros señaló lo anterior en una conferencia de prensa afuera de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje para denunciar que Pemex y el sindicato que encabeza Carlos Romero Deschamps, por cuestiones de pesos y centavos, afectaron a todos los trabajadores activos y jubilados de la paraestatal.

Lo anterior, explicaron, porque modificaron el contrato colectivo de trabajo para incrementar a los empleados de 55 a 60 años la edad de jubilación y de 25 a 30 los de servicio para que puedan acceder al retiro. La unión presentará demandas para exigir la nulidad de esta acción.

Denunciaron que no les han entregado una copia del contrato colectivo de trabajo, cuya negociación se hizo a espaldas de los trabajadores, por lo que consideran que el convenio pueda tener más sorpresas ocultas. Apenas ayer el secretario general de acuerdos, conciliación y asuntos colectivos de la junta, Guillermo Martín Hernández Galindo, se comprometió a entregar el documento el lunes 7 de diciembre.

La unión explicó que el Fondo Laboral de Pensiones y el Fideicomiso de Cobertura Laboral y de Vivienda fueron constituidos para garantizar el pago de jubilaciones y pensiones a largo plazo, pero lo tomaron por decreto y utilizaron para pagar deudas, lo que es ilegal ya que los fondos fueron usados para fines diversos, en tanto ahora están convirtiendo las jubilaciones de los petroleros en deuda pública, cuando nunca antes lo fueron.

En la movilización pidieron la reinstalación de dirigentes y afiliados de esta unión que fueron despedidos por Pemex, sin que hubieran cometido falta alguna, ni violado ningún reglamento.