Andrés Manuel López Obrador propuso que una comisión del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) solicite una audiencia pública con el titular del Ejecutivo, Enrique Peña Nieto, para presentarle la propuesta alterna de solución al problema de saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).

El esquema, difundido ayer, implicaría un ahorro de 100 mil millones de pesos de los 170 mil millones estimados por el gobierno federal para construir uno nuevo en Texcoco, estado de México.

El presidente del Consejo Nacional de Morena delegó en una comisión –integrada, entre otros, por los coordinadores del partido en la Cámara de Diputados, Rocío Nahle, y en la Asamblea Legislativa, César Cravioto– el encargo.

En entrevista, rechazó que acompañe a los integrantes de la comisión. “Yo no voy a ir, ya terminé con mi propósito de presentar un proyecto alterno. Si Peña los recibe, se dará cuenta de que el proyecto es viable, serio para el país. Conviene a todos, incluso al gobierno.

“Independientemente de nuestras diferencias, estamos hablando del interés de la nación, del patrimonio nacional… Él (Peña Nieto) debe conocer el proyecto. Sería muy bueno que se solicitara una audiencia para presentarlo. Ojalá pueda convertirse en realidad y que Peña Nieto inaugure antes de que termine (su sexenio) el proyecto que estamos presentado”, sostuvo.

Acompañado por los dos especialistas que participaron en la elaboración de la propuesta –Sergio Samaniego, experto en avalúos, topografía y geodesia, y el estructuralista José María Rioboo–, López Obrador señaló que es un despropósito el gasto planteado por el Ejecutivo, pues pretende cerrar el AICM y la base aérea de Santa Lucía, pese a que es más eficaz y barato remodelarlos.

En el hotel Hilton Alameda, Samaniego explicó que el escenario alterno plantea remodelar el AICM –desplegado en 750 hectáreas–, con el fin de que se utilice sólo para vuelos de pasajeros y carga nacionales, sin quitar las dos pistas y las dos terminales aéreas con que actualmente cuenta, ampliando de 96 a 140 las posiciones en estas últimas.

Los vuelos de pasajeros y carga internacionales, más la aduana, se trasladarían a la base aérea de Santa Lucía –que tiene 3 mil hectáreas. Hoy cuenta con una pista y se le añadirían dos de cinco kilómetros cada una. Se mantendría ahí la instalación militar y se utilizaría además para casos de emergencia.

Se incluye mejorar vialidades para descargar el tránsito vehicular y establecer transporte de línea directa para los pasajeros, con un tiempo de traslado de 35 minutos entre el AICM y la base militar.

Según el proyecto de López Obrador, la obra de remodelación estaría lista en 30 meses para movilizar a 50 millones de pasajeros al año y tendría una diferencia de costo calculado de 69 mil millones de pesos por la construcción de dos pistas extras.

Samaniego destacó que su proyecto, comparado con el del Ejecutivo, tiene mayor desarrollo social, menor impacto ambiental negativo y austeridad, entre otros puntos. Dijo que se construirían cinco pistas, las cuales tendrían un costo de 63 mil millones de pesos.